El hecho ocurrió durante la mañana del viernes pasado en una vivienda de la ciudad de La Bandera, en Santiago del Estero. Pasadas las 9.30, una empleada de limpieza notó que un olor nauseabundo salía de la habitación de la adolescente de 17 años y al entrar encontró muerta dentro de una valija colocada arriba de un ropero a una beba recién nacida.

 

Según consignó El Liberal, sin dar ninguna explicación, la menor se mantuvo encerrada en su cuarto durante las 72 horas previas al hallazgo. Además, trascendió que en agosto del año pasado la menor habría terminado un noviazgo y que la situación del embarazo ya había sido alertada.

 

En las últimas horas, Cecilia Rimini, la fiscal encargada de la investigación, ordenó la autopsia sobre el cadáver, pero los peritos informaron que dado el estado de putrefacción resultó imposible realizarla. Además, la Justicia determinó la detención de la menor.

 

Fuentes policiales, revelaron que la hija de la acusada había fallecido hace al menos siete días y que el parto se produjo en Semana Santa. “Me pareció que era un muñeco”, habría señalado uno de los testigos a la Policía en referencia a la beba que pesaba unos 3 kilos, según las pericias.

 

En otro orden, trascendió que la adolescente fue internada en una clínica el fin de semana tras presentar un cuadro de infección. Hasta el momento, no pudo constatarse si su hija nació viva o muerta.

 

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