*Por Jorge Cicuttin
“¡Que se vayan a lavar los platos!”, fue el mensaje que el 24 de septiembre de 1994 el entonces superministro de Economía, Domingo Cavallo, le envió públicamente a la socióloga y demógrafa Susana Torrado. Ella había advertido entonces que la política de desprecio hacia los científicos argentinos que estaba llevando adelante el gobierno de Carlos Menem nos iba a llevar al desastre.
Dos décadas después, en noviembre de 2015, cientos de investigadores, estudiantes y profesores, lavaron platos en las escalinatas de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, para llamar la atención sobre lo terrible que sería para la ciencia argentina un triunfo de Mauricio Macri en el balotaje presidencial. “No da lo mismo un proyecto soberano de país que uno que desfinancia la formación científica”, decían entonces.
El ex presidente Carlos Menem y el ex ministro Domingo Cavallo. Defenestraron a los científicos. Arrasaron en las elecciones de 1995.
Para los débiles de memoria, después de esa frase de Cavallo, Carlos Menem ganó ampliamente su reelección. Y Mauricio Macri llegó a la Presidencia pese a esa advertencia del mundo científico.
El diario Página 12 reflejó en su tapa el histórico agravio de Cavallo. Hubo polémica en todo el país.
Los votaron millones de argentinos y, como era de esperarse, la ciencia argentina se desfinanció, se bastardeó y se fueron del país cientos de jóvenes científicos.
Hoy, cuando la necesitamos más que nunca en medio de esta despiadada pandemia, la ciencia argentina nos vuelve a llenar de orgullo y a salvar vidas.
Científicos argentinos –con el apoyo del Ministerio de Ciencia y Tecnología y del Conicet-, desarrollaron un test de diagnóstico rápido y económico para detectar el Covid-19. Los primeros 10.000 test serán producidos durante los próximos 10 días. Y en el corto plazo se podrían elaborar 100.000 test por semana. Esto permitirá detectar rápidamente a los infectados y realizar muchos más controles, lo que es fundamental a la hora de enfrentar la pandemia. Todo gracias a la ciencia y la industria nacional.
El presidente hizo el anuncio en Olivos junto a los ministros de Salud, Ginés González García, y de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza. “Es un orgullo. Esto es soberanía.”
“Tenemos la mejor calidad humana científica para ofrecer estas respuestas. Esto lo han hecho investigadores argentinos y lo produce un laboratorio argentino, esto es tan importante para el desarrollo de un país porque demuestra que no dependemos de otros, que podemos hacerlo nosotros, esto es soberanía, y eso es lo que todos deben entender”, dijo el presidente Alberto Fernández al presentar el kit de diagnóstico rápido.
El Jefe de Estado al explicar en su anuncio el funcionamiento del kit.
El coronavirus, sus muertos y el aislamiento social que vivimos, modificó el mundo. Este cambio nos hizo revalorizar, en la Argentina y en el resto de los países, al rol del Estado, al personal de salud, entre otros sectores muy desprestigiados en años en los que reina el mercado y el sálvese quien pueda.
La ciencia y la industria nacional están entre aquellos que hoy levantamos en andas, los necesitamos y nos responden. ¿Habremos entendido de una buena vez su importancia? ¿Volverán muchos a apoyar gobiernos y dirigentes que desprecian a los científicos?
“Tenemos la mejor calidad humana científica para ofrecer estas respuestas”, dijo Alberto
“Somos tan pobres que no podemos darnos el lujo de no invertir en educación”, dijo Gandhi sobre la India, cuando el país –hoy potencia científica- estaba naciendo en medio de una miseria desesperante.
Durante la presentación del nuevo test de industria nacional, el Presidente estuvo acompañado por los ministros de Salud, Ginés González García y de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza. Este último dio detalles sobre el funcionamiento del kit.
Ginés González García y Roberto Salvarezza dieron detalles del nuevo kit
Salvarezza, justamente, fue uno de los científicos que, entonces como titular de Conicet, en 2015 lavó los platos en las escalinatas de la Facultad de Ciencias Exactas, en apoyo a la ciencia nacional.
El viernes 15, en Olivos, dejó los platos y el detergente, y tomó el micrófono para dar detalles de un orgullo de la ciencia y la industria nacional.
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