Científicos argentinos descubrieron mutaciones del coronavirus Covid-19 hallado en cinco muestras realizadas en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires con variantes similares a las que se registraron en Sudáfrica y Río de Janeiro.

Mediante la secuenciación genómica completa, el ANLIS – Malbrán (Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud) confirmó la presencia de la variante de Río de Janeiro en nuestro país (derivada del linaje B.1.1.28), y detectada en Brasil desde octubre del año pasado.

La directora científico-técnica del Instituto Malbrán, Claudia Perandones (M.N. 83.079), explicó que “una de las mejores formas de conocer un organismo es secuenciar su genoma, que contiene las instrucciones necesarias para hacerlo funcionar. Cuando se produce una pandemia como la de COVID-19, conocer el genoma del agente infeccioso responsable proporciona información con gran relevancia para los investigadores. Les permite identificar qué es lo que causa la enfermedad, conocer su origen y evolución con el tiempo o desarrollar estrategias terapéuticas para hacerle frente”

La secuenciación genómica es la única tecnología que permite la confirmación de reinfecciones. “Es indispensable para el seguimiento de la diversidad de las regiones del genoma como candidatas vacunales a un nivel de precisión de nucleótidos y su comparación en distintas zonas geográficas, y así vigilar la circulación de los posibles vectores de adenovirus”, señaló a Infobae.

“Cabe aclarar que varias de las fórmulas de vacunación se sustentan en estrategias de vectores de adenovirus y, por lo tanto, es fundamental realizar la secuenciación genómica de todos los adenovirus que circulen tanto a nivel nacional como regional, para garantizar la efectividad de la protección a través de la vacunación”, afirmó Perandones.

 

Por el momento se detectaron en el mundo tres variantes del Covid-19

Una de ellas, es la variante VOC 202012/01 o “Variante UK”, detectada en Reino Unido el 20 de septiembre pasado, y que ya ha sido reportada en 23 países, entre ellos Brasil, Chile, Canadá y Estados Unidos; la variante 501Y.V2, que fuera registrada en Sudáfrica el 8 de octubre y que también fue encontrada en Reino Unido, Suiza y Finlandia; y la de Río de Janeiro, que fue individualizada ese último mes.

Las variantes comparten algunos cambios genéticos comunes, pero tienen orígenes evolutivos distintos.

Según detalló el Proyecto PAIS, “desde que comenzó la vigilancia activa de las variantes de interés de SARS-CoV-2 (14/12/20 al 26/12/20), sobre un total de 144 muestras secuenciadas de la CABA, GBA y ciudad de Santa Fe (39 del reporte N°9 y 105 del actual), no se ha detectado aún ninguno de los cambios marcadores de la proteína S de la variante VOC202012/01 (UK), mientras que en cinco muestras se detectó el cambio S_E484K (procedentes de CABA y GBA)”.

El grupo de investigadores indicó que se relaciona con “una de las tres mutaciones marcadoras de la variante de Sudáfrica, y también se encuentra como única mutación del gen S en la variante de Río de Janeiro”.

“Aunque el hallazgo es interesante, se requiere secuenciar el genoma completo del SARS-CoV-2 para determinar si el virus encontrado en GBA comparte un origen común con la variante de Río de Janeiro”, se advirtió.

Se trata de una mutación que está presente tanto en la variante 501Y.V2 (una de las tres detectadas en Sudáfrica), como en la de Río de Janeiro.

El grupo de científicos señaló que “el aumento de positividad de casos que se está dando en diferentes regiones del país requiere continuar vigilando activamente estas variantes y otras que pudieran surgir”.

 

 

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