“No son específicos, pero son para un tratamiento que funciona muy bien”, explicó el titular de la cartera sanitaria al diario La Mañana de Neuquén en una entrevista en la que también trató otros temas referidos a la pandemia.

 

 

En el mismo sentido, García se mostró seguro respecto al arribo del antídoto contra el coronavirus. “Para fin de año o principios del año que viene vamos a tener vacuna. Estamos negociando con todos los proveedores, lógicamente, con la exigencia de que tenga los estándares de aprobación exigidos a nivel mundial, no hay ninguna vacuna que haya logrado esto todavía”.

 

 

“Estamos comprando todo lo que tengan disponible cuanto antes. Por eso, yo confío en que vamos a tener un acceso importante en el mediano plazo. No falta nada, dos meses y medio o tres”, aseguró el ministro, aunque advirtió que hasta tanto se pueda distribuir en todo el país, “lo más importante es la prevención, no hay muchos secretos: o aislamiento o protección personal o distanciamiento”.

 

 

Más tarde, García se refirió a la falta de médicos en el interior del país. “Ahora, no necesitamos insumos ni faltan elementos, como respiradores, lo que falta es recurso humano. Por eso hay que cuidarlo mucho, porque es difícil de hacer, demora años en formarse, porque tiene más exposición al riesgo que el resto”.

 

 

Tras sostener que la cuarentena inicial sirvió para preparar el sistema de Salud, García comparó lo sucedido en la Argentina con el impacto en el viejo continente. “Si no hacíamos lo que hicimos y hubiesen venido todos los casos juntos como pasó en Europa, hoy estaríamos multiplicando los muertos que hemos tenido y habríamos tenido hace unos meses ya un escenario con gente sin atención, gente muerta en las calles, como pasó en otros lugares”.

 

 

“En cuatro meses dotamos al sistema con cuatro mil camas nuevas de terapia intensiva, que es prácticamente un 50 por ciento más de las que había. No es poco ni lo han hecho muchos países“, concluyó.

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