Según pudo saber La Opinión Austral, la decisión del Gobierno de Santa Cruz se dará en el marco de un decreto provincial en el que las autoridades trabajan para evitar la suba de contagios pero, por sobre todas las cosas, el ingreso de las nuevas cepas al distrito.

Ya el viernes, el Gobierno Nacional ordenó restringir los vuelos provenientes de Brasil, México y Chile, donde las nuevas cepas ya circulan.

La situación de Chile es preocupante para el distrito santacruceño, que comparte con el vecino país varias fronteras.

La idea del Gobierno de Alberto Fernández es que la circulación de personas durante el feriado de Semana Santa no detone la escalada de contagios y evitar que salgan vuelos al exterior para esa fecha. Esa decisión administrativa ya está vigente desde el sábado.

El presidente logró el respaldo de las provincias con frontera, en una reunión que se llevó adelante al promediar marzo, para analizar medidas para mitigar el impacto de los nuevos contagios y prevenir la llegada de las cepas que circulan en otros países, como la de Manaos, que es la más cercana.

El presidente logró el respaldo de las provincias con frontera

En ese contexto, la gobernadora Alicia Kirchner y su equipo estuvieron de acuerdo con las restricciones al turismo, algo que no cayó del todo bien en la villa turística de El Calafate, que orientó sus energías a que se habilitaran frecuencias y se permitiera al sector comercial atender la demanda de turistas extranjeros durante la temporada que pasó.  En Alcorta sostienen que el asunto no es negociable.

De las reuniones de la semana pasada participaron el gabinete santacruceño y autoridades provinciales del área de Frontera con los ministros Sabina Frederic (Seguridad), Eduardo De Pedro (Interior) y Mario Meoni (Transporte).

Asimismo, luego del Consejo Federal de Salud, el ministro provincial, Claudio García, dijo que: “Se abordó la situación en torno a las nuevas cepas y las estrategias para prevenir que las mismas ingresen al país”.

Entre las medidas posibles a nivel país, aparecen la obligación que tendrán todas las personas que ingresen al país de realizarse un testeo para determinar si están contagiadas o no con coronavirus.

Será un PCR que deberá pagarse cada uno de los que vuelvan a Argentina. Además, y a diferencia del año pasado, cada ciudadano “repatriado” deberá hacerse cargo de los gastos de su cuarentena ni bien pise el país, básicamente porque ya no habrá hoteles para eso, y realizará diez días de aislamiento en su domicilio.

Según trascendió, por el momento no cerrarán las fronteras entre provincias ni se va a restringir la circulación en algunas franjas horarias del día.

Decreto

En este punto, fuentes consultadas por La Opinión Austral indicaron que el Gobierno de la provincia trabaja a contrarreloj en un decreto para poner restricciones al transporte terrestre y aéreo que terminaría de definirse en una reunión que tendría lugar este mediodía.

Asimismo, se buscará establecer una ruta segura para el transporte de carga terrestre, barajando para eso las rutas nacionales 40 y 3, además de la factibilidad de realizar testeos para pasajeros de avión.

Es muy posible que luego del anuncio de anoche (ver página 3), el Gobierno de Santa Cruz defina dispensar al personal de la administración pública de tener que acudir a sus puestos de trabajo. Según explica la misiva federal, la idea es que lleven adelante home office y pidieron a las provincias que adhieran, por lo menos hasta el miércoles.

Está prevista una reunión del gabinete a las doce del mediodía para definir el decreto

Por otro lado, si bien la reunión del gabinete provincial será en horas del mediodía, se espera una intensa jornada, en función de los encuentros de los consejos de Salud y Turismo que se harán en la tarde.