En 2014, Marta Ampuero y Rodrigo Vivar abrieron la Escuela de Danzas Folclóricas Kimen Nahuen (“Enseñar con firmeza” en tehuelche) en Río Gallegos.
“La idea siempre fue integrar, que nadie quede afuera, llevamos 11 años gracias a Dios cumpliendo sueños de bailarines”, expresó Ampuero a La Opinión Austral.
El primer desafío fue darse a conocer. “Cuando había una presentación o festival me comunicaba, así empezaron a llegar las invitaciones, ahora las invitaciones llegan solas”, recordó.
Así también, llegó el primer viaje. “Fue un desafío grande porque el primer viaje fue a Gregores con el grupo de pequeñitos, fue nuestra primera prueba de fuego, llevar niños, llevar padres, era un festival muy lindo, para disfrutar”, contó Vivar.
La escuela inició con grupos de niños. “Después, con cada presentación, nos fuimos haciendo conocidos y ahí se fueron incorporando niños más grandes y adolescentes, después formamos el grupo adulto y este año, el de adultos mayores”.
La experiencia trabajando con adultos mayores, destacó Ampuero es “hermosa y placentera. Las chicas estuvieron en el Abuelazo en Córdoba y sacaron un segundo puesto, las estoy esperando con los brazos abiertos. Son unas genias totales y las ganas que les ponen, te dan ganas de hacer más cosas, están rondando entre los 60 y 83 años”.
En cuanto a la inclusión de personas con discapacidad, fue desde los inicios. “Ese era el objetivo de la escuela, tener inclusión. Los chicos están desde que empezamos, ‘Lucho’ y Martín fueron los pioneros de la escuela y todavía están acá, este año ‘Luchito’ se recibe de profesor de danzas, Javier se recibió de maestro de danzas. A los chicos les gusta mucho bailar, se prenden en todas, las chicas son unas genias, los acompañan y los guían entonces dan ganas de seguir adelante cuando pasan estas cosas“.
“Hay que animarse, siempre está la típica frase: ‘No sé bailar’, ‘Soy duro’, pero eso fluye, hay que tener paciencia y concentración, el resto sale solo”, señaló y para cerrar, afirmó que “siempre hay posibilidades para que se sumen, las puertas de la escuela siempre están abiertas para todos los chicos”.
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