El Tribunal Oral Federal de Río Gallegos se expidió por el caso que tenía como acusado a un joven de nuestra ciudad capital al que, hace cuatro años, le encontraron algunos gramos de marihuana en su poder, tras escapar de un control de la Policía Provincial.

El caso tiene como protagonista a Leandro “Chancho” Zura, un joven de 23 años, nacido en nuestra ciudad capital, pero que desde hace años vive en la ciudad de Caleta Olivia. Padre de dos hijos, trabaja como changarín, en la descarga de camiones.

En caso de que Leandro Zura cometa algún nuevo delito, puede ser encarcelado.

De acuerdo al fallo al que tuvo acceso La Opinión Austral, a Leandro Zura se lo acusaba de “tenencia de estupefacientes con presuntos fines de comercialización”, pero finalmente sólo fue condenado por “tenencia simple”, ya que no se pudo acreditar que él fuera dealer.

Todo se remonta a la madrugada del 17 de mayo del 2016, en la ciudad de El Gorosito, cuando el personal del Comando Radioeléctrico y de la Comisaría Quinta realizaba un control preventivo en inmediaciones de las calles La Barranca y Corrientes.

A ese lugar llegó Leandro “Chancho” Zura a bordo de una moto, pero una vez que vio a los patrulleros se dio a la fuga. Luego de unos minutos de persecución, finalmente pudieron detenerlo. Según el informe de la Fuerza de Seguridad Provincial, a él se le cayó un envoltorio de marihuana y, cuando fue trasladado a la Seccional, hizo entrega de cuatro más.

En total, todos los envoltorios tuvieron un pesaje de 35 gramos de marihuana y, en esa oportunidad, la Justicia ordenó que le secuestren su celular Blackberry.

El celular del joven fue peritado por el personal de la Policía Federal de Comodoro.

El aparato fue peritado en su momento por el personal de la Policía Federal de Comodoro Rivadavia y surgieron algunos mensajes que darían cuenta que el ahora padre de dos criaturas se dedicaba a la venta de droga. “Eh, man, está la onda de 25 gramos a 500” indicó uno de los mensajes que surgieron a partir del trabajo realizado por el área de la Fuerza Federal.

De igual modo, esto no pudo ser acreditado de manera fehaciente y, finalmente, la Fiscalía General a cargo de Patricia Kloster solicitó que Zura sólo sea juzgado por “tenencia simple”.

En el fallo, firmado por el juez Mario Gabriel Reynaldi, el magistrado entendió que la ausencia de antecedentes penales, el buen comportamiento de Zura, que es padre y sostén de la familia, daban lugar a lo pedido por la Fiscalía y condenó a “Chancho” a la pena de un año de prisión en suspenso, es decir, que no iría a la cárcel.

De igual manera, el joven deberá fijar domicilio una vez al mes en las instalaciones de la sede local de Prefectura Naval Argentina, hasta tanto termine su sentencia. Asimismo, deberá abstenerse de consumir bebidas alcohólicas en público, ni drogas.

Más allá del antecedente que pesa ahora en su contra, en caso de que cometa algún delito hasta tanto se extinga su pena, podría ser encarcelado y que la misma sea efectiva.

EN ESTA NOTA Caleta Olivia

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