En el marco de la jornada del Plan Detectar, el secretario de Salud, Carlos Catalá, explicó que se acercaron al Gimnasio Municipal N° 3 de Caleta Olivia alrededor de 150 personas. “Vinieron espontáneamente porque se realizó una convocatoria. La gran mayoría eran del barrio Máximo Abásolo aunque también se acercó gente de otros barrios y se evaluaron porque lo importante es decretar aislamiento en caso de tomarse como positivo, ya sea por testeo o por determinación epidemiológica”, comentó.

 

 

Este sistema que se establece en los barrios permite, además de obtener resultados de casos positivos en forma muy rápida, “detectar contactos estrechos y aislarlos también, y entre ellos detectar pacientes con enfermedades prexistentes o de riesgo. También la asistencia posterior ya sea con medicación, en caso de ser necesario, como con alimentos, porque hay familias que no cuentan con familiares o amigos que puedan hacer compras por ellos”, agregó Catalá.

Respuesta de los vecinos

El secretario municipal valoró que “la gente respondió de gran manera, no hubo ningún problema, respetaron todo el protocolo y entendieron que esto no es un centro de hisopado sino que el equipo de salud determina el estudio y si se les explica que son considerados positivos sin necesidad de hacer el testeo, deben permanecer aislados”. Además, reconoció que “es evidente que mucha gente no cumplió con el aislamiento teniendo síntomas, ya sea habiéndose sometido a un hisopado o no. Con este sistema apostamos a un cambio porque se acerca mucha gente y eso quiere decir que les importa saber y les importa no contagiar”.

El procedimiento

En la jornada hubo 40 personas trabajando, la mayoría del Municipio de Comodoro Rivadavia, voluntarios de las carreras de Medicina y de Enfermería de la UNPSJB, personal de Salud de Chubut y parte del equipo de Salud de Nación que estará en Comodoro Rivadavia por 14 días.

A diferencia del proceso que se somete al PCR y cuyo resultado tarda algunos días, el procedimiento del Plan Detectar establece también un hisopado, pero de una sola fosa nasal. La muestra se introduce en un líquido que saca la carga genética viral y se introduce en un aparato parecido al test de embarazo, que determina en minutos si es positivo o negativo.

Las personas se van atendiendo por orden de llegada con un protocolo sanitario estricto que incluya distanciamiento social en fila y adentro del gimnasio, desinfección constante de las instalaciones y protección de trabajadores. Se hace un “triage” en donde primero se entrevista a la persona y allí se considera si deben o no ser sometidos a un hisopado. Posteriormente, a los casos positivos se les hace firmar una declaración jurada para comprometer su aislamiento y se toman los datos para el seguimiento y asistencia.

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