Dos sobrinos y un puestero fueron demorados por la Policía, sindicados como posibles autores de un cruento homicidio que se conoció en la tarde noche del lunes en la estancia Chacabuco. Su propietario, Ricardo Andrade, apareció muerto de un hachazo en la cabeza.
Un cruento homicidio conmocionó a la comunidad rural de la provincia, al conocerse que uno de los 13 hermanos Andrade, una familia pionera, apareció muerto de un hachazo en la cabeza, en el interior de la estancia Chacabuco, ubicada a la vera del Lago San Martín, a unos 90 kilómetros de Tres Lagos.
Se trataba de Ricardo Andrade, un hombre de 75 años, ermitaño que, desde hace 40 años, “no bajaba al pueblo”, y que su solo contacto con el resto de los familiares era cuando lo iban a visitar.
El cuerpo del estanciero fue encontrado por un trabajador del lugar. Su cabeza presentaba una herida expuesta que habría sido producida por un hacha. El hombre en cuestión fue quien dio aviso a las autoridades para que investiguen el caso.
El personal de la Unidad Operativa Tres Lagos viajó al lugar del hallazgo y comenzó con las primeras averiguaciones con el fin de determinar quién fue el autor del cruento homicidio.
En paralelo, del caso tomó conocimiento el Juzgado de El Calafate y el magistrado Carlos Narvarte ordenó una serie de acciones, entre ellas, la autopsia que, en la jornada de ayer, se llevó adelante en nuestra ciudad capital, aunque el resultado de la misma aún no ha trascendido.
Una comisión del Cuerpo de Criminalística de la Policía con asiento en Río Gallegos debió viajar a la estancia para realizar las diligencias de rigor, mientras los agentes de la Unidad Operativa se entrevistaron con trabajadores del establecimiento y con familiares con el fin de buscar posibles sospechosos.
En la mañana de ayer, el magistrado de la ciudad turística ordenó la detención de tres personas sindicadas de haber cometido el hecho. El primero de ellos fue el peón que encontró el cuerpo de Andrade y, los dos restantes, dos sobrinos del dueño de la estancia. De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, ellos dos fueron los últimos que habrían visto con vida a su tío, ya que habían pasado el fin de semana con él en el establecimiento rural.
Las detenciones de los sobrinos se realizaron en la ciudad de Piedra Buena, localidad en la que residen, y en las próximas horas serán trasladados a El Calafate para que cuenten su versión de los hechos. Según trascendió, uno de ellos es menor de edad.
Lo que resta saber es si el arma con la que se cometió el brutal asesinato se encontraba cerca del cuerpo de la víctima. Ayer, portales de comunicación aseguraban que un hacha ensangrentaba se encontraba a centímetros del cuerpo, dato que no fue acreditado desde la Policía.
Lo cierto es que, autoridades policiales indicaron que Andrade presentaba dos lesiones en la cabeza. Una de ellas habría sido la que le dio la muerte.
Establecimiento histórico
La estancia Península Chacabuco fue fundada por los padres de Ricardo y Luisa en 1920. Llegados de España y Alemania o (Gran Bretaña) tuvieron en la estancia sus 13 hijos, 8 varones y 5 mujeres.
La casa de la estancia es una construcción de machimbre de raulí pintado, sobre una ladera que mira a uno de los brazos del lago San Martín. Las formas, los olores, colores y la decoración están detenidas en el tiempo, detalló la revista Aire en el año 2017.
Es la misma casa que habitaron sus padres y hermanos, Ricardo, al menos hasta hace dos años vivía junto a su hermana Doña Luisa, quien decidió volver a la estancia luego de tener su familia, vivir en el pueblo y enviudar.