“La vida no te da lo que tú quieres. Te da lo que necesitás aprender” es una conocida frase de Yudis Lonzoy -un influencer en ventas -muy conocido en las redes sociales- que eligió Daniel Zarzosa para poner en su biografía su perfil de Instagram.

Zarzosa es un joven de Comodoro Rivadavia que estaba detenido desde junio del 2015 en la Comisaría Segunda de Puerto San Julián, pero desde el 11 de enero nadie sabe su paradero.

Estaba condenado a ocho años de prisión por un robo que cometió junto a Fernando Bonfil y Gustavo “El Paisa” Durán en Gobernador Gregores. Cabe remarcar que, el fin de semana pasado, éste último fue recapturado en Pico Truncado, tras haber escapado de Las Heras.

 

El 11 de enero fue la última vez que se vio al preso dentro de la Comisaría Segunda

Tal como lo informó La Opinión Austral en su momento, la alerta por la desaparición de Zarzosa se dio recién el 15 de enero, pero según el documento exclusivo al que tuvo acceso este diario, a través del trabajo de la Dirección de Investigaciones (DDI) en las cámaras de la Comisaría se pudo establecer que el registro fílmico lo tenía registrado, por última vez, cuatro días antes.

En la continuidad de las averiguaciones que lleva adelante la Justicia Provincial para dar con Zarzosa, el día antes de que Durán fuera recapturado se realizaron controles entre Puerto San Julián y Pico Truncado, lugar a los que se sospecha que el comodorense habría escapado.

 

De acuerdo a diversas fuentes consultadas por La Opinión Austral se pudo saber que, durante la semana pasada en la ciudad portuaria, el Juzgado de Instrucción N° 1 subrogado en estos momentos por la jueza Anahí Mardones, ordenó un allanamiento en la casa de un efectivo policial que presta funciones en la Comisaría Segunda de San Julián, dependencia policial de la que escapó Zarzosa.

Se trata de un sargento de iniciales J.L.M., que fue allanado por sus pares de la DDI.
Según pudieron afirmar las fuentes consultadas por este medio, al policía le encontraron una cantidad de dinero no determinada de la cual no pudo acreditar su procedencia.

Además de algunos ticket de transferencias bancarias que fueron secuestrados para poder ser analizados.

Trascendió además que el agente de las fuerzas de seguridad que fue allanado cuenta con algunos descuentos judiciales y deudas.

 

El efectivo de la fuerza policial cuenta con descuentos judiciales y algunas deudas

De averiguaciones llevadas adelante por este diario se supo que J.L.M. fue el primer policía en aparecer en las cámaras de seguridad una vez que Zarzosa había desaparecido -o al menos no volvió a ser captado- de la Comisaría Segunda.

Tal como lo informó La Opinión Austral en su momento, cerca de las 20:30 horas del 11 de enero pasado, fue la última vez que la cámara 3 que enfocaba al pabellón de la dependencia policial filmó a Zarzosa, yendo en dirección a la Guardia.

 

Media hora después, J.L.M. fue el primero en aparecer en la siguiente captura. El sargento se acercó a los pabellones para darle una medicación a otro interno.

Según el documento exclusivo, el sargento no volvió a ser nombrado en el mismo. Cabe remarcar que, en esa oportunidad, los investigadores que analizaron las cámaras de seguridad habían solicitado a la Justicia que se secuestren los teléfonos celulares del compañero de Zarzosa y de todos los efectivos que hicieron de celadores en los controles posteriores.

Asimismo, en su momento, se pidió a la Justicia el permiso para triangular las celdas en las que habría usado su celular el prófugo.

 

La DDI que analizó las cámaras, pidió triangular las celdas del celular de Zarzosa

Zarzosa -antes de ser prófugo de la Justicia- era un referente de las personas en diversos reclamos y constantemente se comunicaba con este diario para anunciar huelgas de hambre.

Esta vez, fue al revés, La Opinión Austral intentó contactarse con él, pero continúa con su teléfono apagado; posiblemente lo descartó para no ser descubierto.

 

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