Hace tiempo se viene trabajando con la idea de que la protección de la naturaleza y las distintas actividades productivas, entre ellas las derivadas de la industria del turismo, no tienen por qué ser temas que se contrapongan.

De hecho, durante el año en curso, la provincia asumió el compromiso común y universal para la implementación de los objetivos y metas de la agenda 2030 para el desarrollo sostenible, entre los cuales la modernización de la gobernanza ambiental resulta un eje transversal en las políticas públicas.

 

Santa Cruz es una de las provincias argentinas con mayor superficie en kilómetros cuadrados destinados a la protección de la naturaleza, ubicándose en los primeros lugares del país respecto de la cantidad de áreas protegidas tanto nacionales como provinciales.

Cabe destacar que en el mes de julio pasado y luego de un gran esfuerzo de cooperación y trabajo con distintas organizaciones públicas y privadas, la provincia protegió para siempre el “Sitio Patrimonio de la Humanidad Cueva de las Manos”, ubicado a pocos kilómetros de la localidad de Perito Moreno, aprobando además la implementación del plan de manejo del área.

La provincia protegió el “Sitio Patrimonio de la Humanidad Cueva de las Manos”

Sin embargo, ante escenarios dinámicos en permanente cambio en la región, se han acumulado una serie de tensiones y conflictos que en la actualidad resultan complejos para abordar sin un apropiado contexto de ordenamiento territorial como política de Estado.

Valle del río Pinturas.

Esta situación derivó en la sanción de la Ley Nº 3.692 que declara la “Emergencia en Materia de Posesión y Tenencia de Tierras Rurales”.

Para abordar la situación de forma estratégica, el Gobierno Provincial conformó un equipo de trabajo junto con distintos organismos y representantes de la sociedad civil para evitar la continuidad de acciones aisladas, no planificadas y/o no articuladas entre las diferentes áreas de los gobiernos provincial, nacional y municipales de la región.

Información confiable

Desde una perspectiva integradora, durante 2020 se puso en marcha un ejercicio de diagnóstico territorial y planificación interdisciplinaria para la región noroeste de Santa Cruz, identificada como el escenario ideal para la sinergia entre actividades productivas, turísticas y fundamentalmente para la protección de la naturaleza que representa uno de los más altos valores de la identidad santacruceña.

Santa Cruz es una de las provincias argentinas con más protección de la naturaleza

Si bien la situación de pandemia ha dificultado los encuentros técnicos presenciales, se espera tener los primeros resultados de este trabajo para principios de 2021.

Las fuentes consultadas indicaron que la generación de información confiable, exhaustiva, completa, actualizada, apropiadamente documentada, continua en tiempo y espacio, resulta ser “la principal herramienta para diagnosticar apropiadamente los problemas y realidades de la provincia, en particular para identificar las complejidades, interacciones e interdependencias que determinarán los pasos a seguir para lograr un desarrollo sostenible”.

 

Todo ello implica necesariamente, una nueva perspectiva de equilibrio entre las dimensiones ecológica, política, social y económica en el marco de una ética que contempla a la comunidad y que promueve una nueva forma de habitar la casa común.

Ubicación y características

La cueva de las Manos es un sitio arqueológico y de pinturas rupestres que se encuentra en el profundo cañón del río Pinturas, a 88 metros de altura, en la Estancia Cueva de las Manos entre las localidades de Perito Moreno y Bajo Caracoles en el departamento Lago Buenos Aires, al noroeste de Santa Cruz, Patagonia.

La cueva tiene 20 metros de profundidad, 10 metros de alto y 15 metros de ancho, y es de difícil acceso.

Si bien en su interior se hallaron, además de vestigios materiales líticos, fogones con restos, y también huesos y pieles de animales que eran la base de la subsistencia, en este sitio arqueológico se destaca la complejidad del arte rupestre, que permite entender cómo vivieron aquellas sociedades del pasado.

Su interés radica en la belleza de las pinturas rupestres, así como en su gran antigüedad: hasta el momento, las inscripciones más antiguas están fechadas el año 7350 a. C. Se trata de una de las expresiones artísticas más antiguas de los pueblos sudamericanos.

 

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