La semana concluyó con un violento accidente de tránsito en la ciudad de Río Gallegos. Afortunadamente, pese a la magnitud del siniestro vial, en el que sólo hubo un conductor involucrado, no hubo que lamentar personas lesionadas.
El hecho se registró ayer por la mañana, en la avenida Juan Manuel Gregores, a escasos metros de la rotonda que conecta con la avenida Presidente Juan Domingo Perón y calle Crucero General Belgrano.
El vehículo fue secuestrado y trasladado hasta el corralón municipal.
Allí, una camioneta Renault Duster terminó destruida luego de impactar contra una columna de alumbrado público. Su propietario, un hombre de 34 años, resultó ileso gracias a que conducía con el cinturón de seguridad colocado y a la activación de los airbags de su vehículo.
El impactante siniestro ocurrió aproximadamente a las 07:30 horas. Minutos después, llegó al lugar una comitiva de la Comisaría Cuarta, luego de que un vecino alertara telefónicamente del hecho.
Cuando los efectivos llegaron al lugar vieron que allí se encontraba la camioneta completamente destruida en su parte frontal, y con la dirección opuesta a la que circulaba. Su conductor no tuvo lesiones, solamente con algunos golpes menores y aturdido por el violento impacto. En virtud de que su estado de salud era óptimo, las autoridades no necesitaron requerir de la asistencia médica para él.
Además de quedar dado vuelta por la inercia del fuerte golpe, la cubierta delantera derecha del vehículo también se desprendió, lo que da cuenta de la magnitud del incidente. Por ello, se estima que el conductor iba a alta velocidad al momento de producirse el accidente.
En el lugar, el propietario del rodado manifestó que perdió el control sobre su camioneta y que no pudo evitar impactar de lleno contra la columna de alumbrado, sin dar mayores detalles de lo sucedido.
Luego de que la Policía interviniera, al lugar llegaron miembros de la Dirección de Tránsito Municipal. Se le requirió la documentación pertinente del rodado y la licencia de conducir al protagonista, presentando este todos los papeles, sin ninguna irregularidad.No o
bstante, cuando fue sometido al test de alcoholemia, la prueba arrojó resultados positivos, motivo por el cual la camioneta debió ser secuestrada por los agentes. En una grúa, la misma fue trasladada hasta el corralón municipal ubicado en la ruta, muy cerca del autódromo “José Muñiz” de Río Gallegos.
Por fortuna, no circulaba ninguna persona por la vereda al momento del siniestro. Tampoco venían vehículos en el mismo sentido que el protagonista, en caso contrario, el hecho no hubiera terminado sólo con daños materiales.
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