La noticia impactó de lleno en el ámbito de la salud, pero trascendió a la comunidad entera. Es que Marcelo Casaro fue un profesional muy querido y conocido por su amplia trayectoria.
Desde su paso como auditor del Colegio Médico de la provincia, el médico infectólogo se desempeñó sus últimos años como médico generalista y trabajaba en el ámbito privado.

Era, además, médico de la Policía de Santa Cruz y trabajaba en el Municipio de Río Gallegos.
Casaro padecía diabetes y, por lo tanto, pertenecía al grupo de riesgo, además, fue uno de los primeros pacientes en recibir tratamiento con plasma en un intento por salvarle la vida.

El profesional murió a sus 49 años, en la noche del martes, luego de cerca de un mes internado en el Hospital de Río Gallegos por un cuadro complicado por haber contraído coronavirus.
Como parte de la tradición cuando fallece una persona del ámbito de la salud, personal sanitario se concentró en la explanada del Hospital Regional junto a sus familiares y allegados para darle el “último adiós”.

Entre sirenas prendidas, aplausos y el llanto desconsolado de sus seres queridos, el padre Sergio Latini le dio la bendición y, posteriormente, el féretro ingresó a la ambulancia que trasladó el cuerpo de Casaro al cementerio local.

 

La partida del médico causó una gran conmoción, no sólo por ser el primer profesional de la medicina en fallecer por el virus, sino por su visión de la pandemia. Antes del brote había advertido que “debían cerrar todo” y que los hisopados debían realizarse de manera “masiva”.
“Fue un previsor de la pandemia”, recordó a La Opinión Austral el presidente del Colegio Médico de Santa Cruz, Horacio Córdoba.

Su colega trajo a la actualidad las palabras del profesional, mucho antes del brote: “Éramos dos locos que veníamos diciendo que había que cerrar todo, que el hisopado tenía que hacerse masivamente, todo lo que conocemos hoy”, describió Córdoba.

Casaro padecía diabetes, enfermedad que lo colocó en el grupo de riesgo y agravó el panorama

Es que, para el profesional, Casaro había anticipado muchas de las medidas que hoy vemos en la provincia y, particularmente, en la capital santacruceña.
“Lo escuchás y decís ¡cuánta razón que tenía en ese momento!”, mencionó el presidente del Colegio Médico, quien reconoció, además, que dialogaban constantemente sobre la pandemia.
No sólo destacó y valoró su trayectoria, sino que destacó que Casaro era un “tipo excelente, un gordo que no levantaba la voz, que se preocupó mucho”.

En una de las últimas entrevistas que le hicieron al infectólogo desde Chile, recordó Córdoba, anticipó lo que “hace meses se viene hablando”. Desde las medidas sanitarias, controles de Seguridad, a que la pandemia “sería mucho peor” de lo pensado.

 

“Hoy ya es tarde y como presidente del Colegio Médico puedo decir que fue una excelente persona, nos queda lamentar su pérdida, porque la peleó de todas formas hasta que ya no pudo”, señaló con angustia para finalizar.

 

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