El 20 de marzo inició el Aislamiento, Social, Preventivo y Obligatorio en todo el territorio nacional con la implementación del DNU 297/2020 para darle pelea a la pandemia ocasionada por el coronavirus.

Transcurridos seis meses, las actividades productivas del país -y las de Santa Cruz- enfrentan una crisis sin precedentes y un futuro incierto.

Si bien el impacto no es igual en todos los sectores, el resultado posee idénticos síntomas: pérdida de rentabilidad y un urgente salvataje a las pymes.

La Federación Empresaria Hotelera Gastronómica (FEHGRA) alertó que el 2020 implicará pérdidas por USD 13.000 millones. En Río Gallegos cerraron -al menos- cuatro tradicionales establecimientos y solicitan la emergencia.

El turismo no registró movimiento. El año se perfilaba mejor que el 2019, periodo en que el Parque Los Glaciares registró 486.308 visitantes.

El comercio es otro sector afectado. Mientras que los doce meses últimos disminuyeron las ventas por encima del 50%, el 2020 se encrudeció ante la pandemia.

Así, las pymes se alivianaron con las ATP de Nación, luego con el Santa Cruz Protege -programa creado por el Gobierno Provincial- para cuidar el empleo en la actividad comercial y de servicios.

 

Turismo

Oscar Souto, secretario de Turismo de El Calafate, precisó que las pérdidas calculadas los primeros 45 días de paralización fueron de USD 15 millones. Incluye pasajes aéreos, hotelería y gastronomía.

Sin actividad, la preocupación es hacia adelante. Desde septiembre se trabaja al 60 % como mínimo. “En el invierno las pérdidas no se acentúan porque hay dotación mínima de personal”, dijo.

Entre los aspectos sobresalientes destacó la sanción de la ley de Sostenimiento y Reactivación Productiva de la Actividad Turística.

“Después de seis meses sin visitantes, las empresas presentan una realidad diferente”, evaluó Souto en declaraciones a La Opinión Austral. Sin embargo, remarcó que el factor que los aglutina es la inactividad que los ha llevado a “facturación cero generando el corte de la cadena de pagos promediando el primer trimestre”.

Mientras se aceitó el trabajo entre el sector público y privado como nunca antes con la misión de brindar contención a las pymes y trabajadores reconocido por Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (AAAVyT) que representa a las 102 agencias de viajes que hoy tiene Santa Cruz- aguardan por la llegada de mayor asistencia.

Las miradas están puestas en el programa provincial “Santa Cruz Protege” que aún se encuentra en etapa de clasificación. “Es un apoyo integral importante para todos los actores, si bien es cierto siguen vigentes las ATP, las empresas enfrentan serias dificultades para cumplir con las obligaciones que les corresponden”.

Mientras volvió a rechazar aquella movilización de los anticuarentena realizada a principios de este mes pidiendo ser autorizados a trabajar, Souto remarcó la decisión del municipio de inclinarse a la asistencia social. Sucede que el 90% de la población depende del turismo y la economía doméstica de los trabajadores se vio afectada.

 

Carolina Neil, de la Cámara de Comercio de Río Gallegos, dijo que inevitablemente se cerraron locales y se perdieron puestos de trabajo.

CCIARG

La titular de la Cámara de Comercio de Río Gallegos, Carolina Neil, recordó a La Opinión Austral que desde la implementación del DNU recién a mediados de mayo autorizaron las aperturas graduales que tuvieron marchas y contramarchas hasta que se extendió el horario de atención actual, pero sin “lograr una recuperación real”.

Mientras tanto, la Cámara insistió al Gobierno la reapertura de las peluquerías, estéticas y cine. “Son rubros que están golpeados y no se sabe si podrán abrir cuando se otorgue la habilitación”, debate llevado adelante con el actual secretario de Comercio de Santa Cruz, el radical Leandro Fadul.

Neil señaló que las ATP fueron un gran auxilio en estos duros meses, mientras que mantienen idénticas perspectivas con el Santa Cruz Protege. Puntualizó que “los grandes ausentes son los bancos, las líneas de crédito garantizadas por el Gobierno no se otorgaron”. La tasa de interés del 24 % propuesto no funcionó y “los préstamos disponibles estaban por encima del 33%”.

Tras recordar que en el sector comercial no se registraron contagios, pidió a la sociedad que “tome las medidas preventivas necesarias para frenar la pandemia”, ya que de seguir este escenario “habrá más cierres y muchas pymes quedarán en el camino”, “inevitablemente hay personas que perdieron sus puestos de trabajo”.

En otro orden, se hizo eco en que se detectaron locales que no dieron cumplimiento a los protocolos de sanidad. Aseguró que la Cámara de Comercio se abocó a dar amplia difusión de las medidas y el comercio formal tiene que cumplirlo.

No obstante, pidió al Estado que “controle más la informalidad que hoy camina por una vía paralela, no sólo en beneficio de los contribuyentes, sino para que el virus no se expanda”.

Mientras la pandemia aceleró la curva de contagio en el territorio provincial, el comercio y el turismo aguardan más ayuda estatal. Con matices, las pymes locales reconocen que en estos seis meses se desplegó una labor entre lo público y privado pocas veces vista. Así, el futuro será mejor.

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