“El panorama técnico ahora sugiere que el oro puede comenzar su tan esperado asalto a 1.800 dólares la onza”, explicó el analista Oanda Jeffrey Halley sobre el metal precioso continúa subiendo impulsado por la incertidumbre provocada por el aumento de casos de Covid-19 y el temor a una segunda ola.

 

 

Durante la jornada del miércoles, alertados también por la tensión comercial entre Estados Unidos y China los inversores se volcaron al oro que trepó a su máximo valor en los últimos siete años (US$1776)

Leé más notas de La Opinión Austral