No sólo por sus récords de audiencia, sino también por lo que padecieron varias personas al tratar de imitar algunos de los desafíos que se muestran en ella. Un chico de 14 años sufrió quemaduras de tercer grado después de intentar realizar un reto de TikTok de la popular serie.  El Juego del Calamar desde que se estrenó en Netflix no dejó de estar en boca de todos.

La producción surcoreana ya se encontraba en el centro de la polémica en los últimos días. Sobre todo después de la masacre que que ocurrió en una discoteca de Panamá en donde murieron ocho personas que intentaban recrear uno de los desafíos de “Squid Game“. Luego la Policía reveló que el motivo del ataque fue una guerra entre pandillas locales.

En esta ocasión, se informó del caso de Aiden Higgie. El adolescente intentaba realizar en su casa el segundo desafío de la ficción (“El plan de azúcar”), y para eso trató de derretir azúcar en una taza empleando una receta que encontró en la red  social TikTok.

Sin embargo, un detalle importante desató la tragedia. Higgie derritió la mezcla en una taza no apta para microondas. Cuando la sacó la misma le explotó en la mano y le cayó encima el azúcar derretida. “La llevó a una temperatura demasiado alta, después tomó la copa y le explotó en la mano. Al desparramarse el plástico, esto le provocó una quemadura en la mano, pierna, rodilla y mandíbula”, especificó su mamá, Helen al Daily Mail.

El adolescente sufrió quemaduras tan graves que los médicos temían que necesitara un injerto de piel. Hasta el momento su diagnóstico indica que Aiden permanecerá hasta el próximo año con un vendaje de presión. “Es impactante que un acto tan simple pueda tener consecuencias tan graves”, se lamentó la madre.

Por otra parte, Higgie es uno de los tres niños que ingresaron en el hospital infantil de Westmead en el último mes por quemaduras al intentar imitar este reto. El jefe Interino de la Unidad de Quemados del nosocomio, Erik La Hei, advirtió a los padres sobre este desafió que es “sumamente peligroso”, y les pidió a los adultos estar más atentos al contenido que ven los jóvenes en las redes sociales.

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