Desde el comienzo de la pandemia, se han recrudecido los reclamos de las personas privadas de su libertad por diversas cuestiones. Las mismas van desde el pedido de alimentos en buen estado de conservación hasta la posibilidad de poder ver a sus seres queridos, o al menos tener contacto con ellos a través de videollamadas.

Ya en lo que parece en el ingreso a la “nueva normalidad“, la situación parece haberse calmado pero, en las últimas horas, se judicializó un reclamo gracias a un pedido explícito que una abogada realizó a las autoridades judiciales, debido a amenazas y violación de derechos de internos de la Unidad Penitenciaria Nº1 de Pico Truncado.

En aquella prisión se encuentran los criminales más peligrosos de la provincia pero, como se sabe, la ley está para ser cumplida y, más allá del delito por el que estén procesadas o condenadas, son personas que solo no gozan del beneficio de la libertad. El resto de los derechos deben ser cumplidos por las autoridades judiciales de la Secretaría de Ejecución Penal.

En esta oportunidad, la abogada Yamila Borquez, que cuenta con un cliente dentro de la prisión de la ciudad del Bridosaurio realizó una presentación en la Justicia pidiendo por la intervención de la Secretaría de Ejecución de Sentencias, para que realicen una inspección in situ de la situación en la que se encuentran las personas privadas de su libertad.

La abogada penalista, Yamila Borquez (FOTO: LA OPINIÓN AUSTRAL)

En la solicitud, Borquez dijo que los internos: “vienen sufriendo hechos que implican una grave y sistemática violación de derechos humanos esenciales y que en contexto de encierro implican un grave perjuicio a su condición y evolución personal“.

Asimismo, expresó que “estas situaciones no son denunciadas por los presos ya que están amenazados y no pueden hacer reclamos diciéndoles que los sancionarían afectando su legajo de conducta, para impedir la obtención de beneficios carcelarios”.

Otro de los hechos que denunció Borquez es que: los presos solo reciben agua solo dos veces al día y solo por una hora cada vez, incluso que los baños no cuentan con inodoros. “Inaceptable en contexto de pandemia”, aseveró en su solicitud. Lo mismo con la comida la cual expuso que es de mala calidad y que trae afecciones gástricas de los internos.

En ese mismo sentido, la abogada dijo que, pese a que los internos acondicionaron espacios comunes para practicar deportes, ellos solo pueden hacer actividad física una sola vez a la semana y durante solo una hora.

En este contexto, la abogada pidió que el personal del Poder Judicial realice la inspección en los pabellones y, como abogada de uno de los presos, se ofreció a poder participar y poder velar por los derechos y garantías de las personas privadas de su libertad.

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