Pasadas las 14, tras realizar el habitual recuento de reclusos, empleados del Servicio Penitenciario notaron que un preso de 22 años se había fugado del Anexo 6. Inmediatamente, luego de buscar en cada rincón del lugar, dieron aviso a efectivos de la comisaría sexta.

 

Tras un arduo operativo, varios patrulleros cercaron la zona cercana al lugar y encontraron al peligroso delincuente que contaría con antecedentes de robo y abuso sexual oculto detrás de tres arboles en el jardín de una casa familiar.

 

Luego de dar la voz de alto, el malviviente se entregó a la Policía y fue trasladado nuevamente al centro de detención. Ahora, investigan cómo huyó y quiénes podrían haberlo ayudado a perpetrar el plan de escape.

Leé más notas de La Opinión Austral