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Un bombero de Río Gallegos salvó la vida de un bebé de apenas un año que se estaba asfixiando en la vía pública. El hecho ocurrió este martes alrededor de las 12:15 horas, frente al Cuartel Central de Bomberos de la Policía de Santa Cruz, cuando la rápida intervención de un efectivo evitó una tragedia.
Según informaron fuentes policiales, la emergencia se registró en la intersección de avenidas Lisandro de la Torre e Hipólito Yrigoyen, donde una madre desesperada pedía ayuda mientras cargaba a su hijo, quien no lograba respirar.
El Suboficial Escribiente Víctor Fuenzalida, que se encontraba de guardia, advirtió la situación y acudió inmediatamente. Tras verificar que el menor sufría una obstrucción en las vías respiratorias, aplicó la maniobra de Heimlich. Luego de varios intentos, consiguió liberar las vías aéreas y el bebé recuperó la respiración normal.
Minutos más tarde, un móvil sanitario del Hospital Regional Río Gallegos llegó al lugar para brindar asistencia médica y trasladar al niño junto a su madre al nosocomio, donde fue sometido a una evaluación preventiva.
La intervención, que se extendió por unos ocho minutos, fue clave para salvar la vida del menor y resaltó la importancia de la capacitación de los bomberos en emergencias médicas.
Este hecho también subraya la necesidad de que la comunidad conozca técnicas básicas de primeros auxilios, como la maniobra de Heimlich, que puede marcar la diferencia en situaciones de riesgo vital.
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