PRESUNTA EXTORSIÓN
El obispo por el caso de los federales: "Siempre me generó incertidumbre"
Gustavo García Cuerva fue entrevistado en La Opinión Radio y contó sus percepciones, tras conocerse sobre el avance de la causa. "Es algo casi anecdótico y bizarro", indicó. Total hermetismo desde la Policía Federal.

"Nadie quiere hablar y menos por celular porque tienen miedo que también se los chupen", indicó una fuente consultada por La Opinión Austral sobre el caso de unos policías federales que fueron acusados por presunta extorsión y que están detenidos.
Se trata de tres agentes de la Policía Federal Argentina que, hasta hace un tiempo, prestaban funciones en la delegación local de la fuerza y que están alojados en la Unidad Operativa de Chimen Aike, imputados de haberse apoderado de una camioneta Volkswagen Saveiro de un cuentapropista.
Además les secuestraron sus teléfonos y en las próximas horas serán peritados para determinar si hay información relevante para la causa, saber si hubo más delitos o más involucrados en el caso. Por eso mismo, hay hermetismo.
Quien sí habló y aseguró que siempre fue abierto para hablar del caso que le generó incertidumbre, fue el obispo Gustavo García Cuerva, testigo en la causa y que, como se sabe, es abogado.
El párroco fue entrevistado en el programa La Opinión Radio, que se emite por LU12 AM680 y FM Láser y contó sus sensaciones sobre un caso que, para él, es "casi anecdótico y bizarro", por algunos ribetes que presentó.
"Ese día iba caminando cerca del hospital. Un hombre que sería de la fuerza me para y me pregunta si tengo documentos. Después me pregunta si por favor puedo salir de testigo en el secuestro de una camioneta, por lo que no tuve problemas. Por eso le escribo a mi secretaria porque me podía retrasar. Me acuerdo que también enganchan a un pibe de 18, 19 que le piden lo mismo", comenzó diciendo el obispo por el procedimiento que se hizo en el estacionamiento del Hospital Regional en julio del año pasado.
En la continuidad de su relato, García Cuerva fue muy preciso sobre lo que vio aquella tarde: "Había una camioneta estacionada, los policías eran tres y tenían sus placas identificatorias, hasta uno tenía una campera de la Policía Federal", aseveró.
Como dato, García Cuerva dijo que el procedimiento no le pareció raro, hasta dijo que, cuando los efectivos escribían el acta, "tenían las faltas ortográficas propias que tienen los policías. Tenía los sellos y las firmas. Incluso algo que me llamó la atención es que le pidió al otro testigo que firme de la misma forma a las dos actas. Este operativo demoró un poco más de una hora, se extendió mucho, fajaron la camioneta, sólo tenía la llave en el asiento de adelante y nos retiramos".
García Cuerva contó que le llamó la atención. "Vi las noticias y me entero que decían que la camioneta había sido robada. Veo las características de la camioneta y lo llamé al ministro de Seguridad, Lisandro De La Torre. Lo alerté sobre algo que me parecía insólito".
El obispo contó que no es la primera vez que hace las veces de testigo. Además de conocer los procedimientos por ser abogado, indicó que "es un compromiso que uno, como ciudadano, tiene que tener".
García Cuerva hizo algunas reflexiones: "Lo que me parece raro es por qué si querían robarla, ¿por qué estuvieron tanto tiempo ahí en el estacionamiento? encima, horas después, aparece en el mismo estado, en el San Benito. ¿Para qué fue? ¿para asustar o ajuste de cuentas? todo muy raro, es algo que deberá investigar la Justicia Federal, es algo que no sé", concluyó
Noticias relacionadas