La minería, el sector productivo de mayor peso en la provincia de Santa Cruz, despliega una serie de acciones entre el sector público y privado para regresar a la productividad. Tarea que será paulatina y tendrá como piedra angular el protocolo diseñado por el Centro Operativo de Emergencias (COE) para prevenir el contagio del COVID-19.

El viernes 3 de abril, decreto presidencial mediante, la minería y otras ocho actividades se incorporaron a las actividades y servicios esenciales. En esa misma jornada, las operadoras Newmont, Yamana Gold, Minera Santa Cruz, Cerro Vanguardia, Triton Argentina y Minera Don Nicolás solicitaron a Provincia el desalojo de los trabajadores que estaban imposibilitados de regresar a sus hogares desde el pasado 20 de marzo, día en que inició el aislamiento social. Así es que, en consonancia, las compañías, el Ministerio de la Producción, el Ministerio de Trabajo, los municipios de influencia (Perito Moreno, Puerto Deseado, Gobernador Gregores, Río Gallegos, entre otros) y los gremios del sector implementaron un operativo en cada uno de los seis proyectos mineros ubicados en suelo santacruceño.

Protocolo

El regreso a la productividad metalífera no es una tarea fácil, se trata de un gran desafío que enfrenta cada uno de los actores que integran este sector productivo. El lineamiento para el regreso ya lo ha dado el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández: la salud por encima de la economía.

Se realiza el control del personal trasladado hacia sus domicilios desde un yacimiento. FOTO: LOA

Así es que la Secretaría de Minería elaboró un protocolo de “traslado del personal minero”. “Será mayormente con mano de obra local, según lo acordaron gobierno y compañías, de acuerdo a lo indicado por el ministro de Trabajo, Teodoro Camino, a La Opinión Austral, salvo aquellas especializaciones que no haya en Santa Cruz. Aseguró que de esta manera toma mayor vigor la Ley Nº 3.141, que establece que la dotación del personal en el sector productivo provincial debe ser con el 70% de mano de obra santacruceña.

Sin embargo, se ha definido que estarán exceptuadas las personas provenientes de los territorios con transmisión local del COVID-19. Se trata de regiones como Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), Chaco, Alta Gracia y Río Cuarto (Córdoba), Santa Fe, Ushuaia y cada uno que se incorpore al Centro Operativo de Emergencia (COE).

“Mineros y transportistas acreditarán fielmente su identidad, lugar de procedencia y destino”; “el ingreso y salida de los yacimientos será bajo Declaración Jurada que acredite que el trabajador no presenta síntomas del COVID-19, certificado médico y control de temperatura”; “la Policía escoltará al personal santacruceño que llegue a su destino final para garantizar que el servicio se haga puerta a puerta”, rezan los primeros puntos del protocolo que establece las medidas preventivas en la minería.

Otras de las disposiciones son que las unidades de traslado deben ser debidamente desinfectadas y que se prohíbe efectuar el traslado en su capacidad máxima de pasajeros.

Salud

Las nuevas obligaciones advierten que “el personal a incorporarse debe haber cumplido 14 días de aislamiento, sin síntomas”, mientras que en su lugar de trabajo dispondrá de “los elementos de protección personal, como barbijos, guantes”, entre otros.

El control de temperatura se realizará al inicio y final de cada jornada laboral y se dejará constancia en un registro. En el comedor no podrá haber más de tres personas por mesa y se respetará la distancia de dos metros, mientras que un solo trabajador ocupará cada dormitorio.

Los diagramas de trabajo, mientras dure la emergencia, serán de forma obligatoria de 14 días. Asimismo, en caso que un trabajador presente síntomas, será aislado en un lugar designado en el mismo yacimiento y recibirá atención del equipo de salud. Permanecerá en el lugar mientras su condición clínica lo permita.

Personal del Gobierno Provincial en la tarea preventiva. FOTO: LOA

Además, será informado el hospital de zona de influencia para que acuda a tomar una muestra y ejecute una prueba. En caso de necesitar derivación, deberá hacerse hacia ese nosocomio.

Ante un eventual caso positivo de COVID-19, el protocolo estatal establece que toda la dotación cumplirá con 14 días de aislamiento.

Con estas medidas iniciales, la minería santacruceña regresa paulatinamente a la producción de metales y desde el sector público destacaron la labor conjunta desarrollada por estas horas que permite disminuir los riesgos implícitos que presenta la pandemia del COVID-19.

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