La Provincia debe firmar dos convenios claves: el del Fondo Fiduciario y el acuerdo de Renegociación de la Deuda. El primero permitiría un financiamiento de $ 1.400 millones y el segundo, recuperar $ 630 millones descontados y prorrogar vencimientos. Uno se firmaría esta semana, sobre el segundo no hay certezas. En tanto la realidad económica de los últimos días, complica una posible colocación de letras.

* Por Irene Stur

“Entre jueves y viernes” espera la provincia poder estar firmando, finalmente, el acuerdo de financiamiento por el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial, mediante el cual se oxigenaría el Tesoro Provincial en $ 1.400 millones, a desembolsar en cuatro cuotas (una fue adelantada en marzo). Cabe recordar que este convenio incluye un anexo por otros $ 200 millones que tienen por destino la ciudad de Río Gallegos.

Dilatado en el tiempo, tanto la Provincia como el Municipio ven con preocupación que no se concluye la rúbrica de esta herramienta, considerada “imprescindible” para lograr, entre otras cosas, poder afrontar el pago del medio aguinaldo que se debe cancelar a fines de junio, principios de julio.

Pero no sólo es ese punto, que ya “per se” es importante, sino que la demora en el tiempo podría provocar que desde Hacienda de Nación les comiencen a descontar los $ 350 millones ($ 300 a Provincia y $ 50 a Río Gallegos) que les adelantaron en marzo.

Refinanciación

Santa Cruz tiene una deuda consolidada a diciembre de este año de $ 16.400 millones de pesos, según informó el ministro de Economía Ignacio Perincioli a los diputados en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, en una exposición en la que La Opinión Austral estuvo presente.

El déficit proyectado en el Presupuesto 2018 es de $ 8.008 millones de pesos, 1.800 millones más que el del 2017.

Esa diferencia en el déficit, en principio, está explicada por el nivel de servicios de la deuda que debe afrontar Santa Cruz este año.

De enero a abril, se le han aplicado ya descuentos en la coparticipación por un total de $ 630 millones por este concepto, a razón de unos $ 170 millones por mes, en promedio.

Esta suerte de “desfinanciación” en tiempos en que el rojo en las cuentas es constante, la Provincia busca revertirlo firmando lo pactado en el Consenso Fiscal, que es la renegociación de la deuda, que permitiría no sólo recuperar esos $ 630 millones pagados, sino evitar nuevos descuentos por los servicios devengados, que totalizarán 2.073 millones de pesos.

Bonos por deuda

En el marco del Consenso Fiscal, se estableció que las provincias recibirían una compensación por ANSeS, que sería pagada en bonos, los cuales no pueden ser utilizados para otra cosa que no sea pagar deuda que los Estados mantienen con la Nación.

De esta forma, Santa Cruz recibiría bonos por 1.834 millones de pesos, que serían aplicados para bajar “el monto general” de la deuda consolidada, y luego sí, refinanciar el saldo que surge de allí.

Cabe recordar que según se indicó por parte del equipo económico en la Legislatura, de los $ 16.400 millones de deuda existente, el 85% fue tomado con el Gobierno Nacional.

Si bien ya varias provincias han firmado el acuerdo de refinanciación, por ahora Santa Cruz no lo ha logrado. Este diario pudo saber que el plazo para hacerlo es en el transcurso de este mes de mayo, pero existe real incertidumbre respecto del cómo y cuándo y si será por la totalidad o no de la deuda.

De no lograr firmarlo, la mejora en los ingresos que hoy existen en algunas variables, podría verse esfumada sólo en el pago de los servicios de la deuda y estirarían las chances del gobierno de Alicia Kirchner de, al menos, achicar los plazos de pago de salarios a la administración pública activa y pasiva que, según los últimos datos trascendidos, insumen “en bruto” $ 1.880 millones de pesos y de “bolsillo” unos $ 1.690 millones, a lo que se le suman las transferencias a los Municipios y los gastos de funcionamiento del Estado Provincial.

Escenario complicado

Pese a que la apreciación del dólar en Argentina permite mejorar, en pesos, los ingresos provinciales, su impacto inflacionario  provoca que el Gobierno Provincial afronte mayor presión gremial que reclama apertura de paritarias. “Hoy los ingresos deberían mejorar muchísimo más de lo que han mejorado para poder afrontar cualquier porcentual de mejora salarial” le indicó a este diario una fuente oficial.  Advirtiendo que la columna de “ingresos” no es la única que se debe observar, sino también la de “egresos”, que también en gastos esenciales, como puede ser el de la salud, crece al son de la inflación.

Pero la preocupación mayor del equipo económico de Alicia Kirchner está en la imposibilidad, una vez más, de que Santa Cruz pueda salir al mercado de bonos.

“En este escenario no sólo será difícil que nos habiliten sino también lograr tasas que sean realmente convenientes”, por lo que una vez más se dilata la posibilidad de conseguir un tipo de financiamiento a largo plazo que otorgue tranquilidad a las finanzas provinciales.

Este año, la intención era, promediando el año, poder lograr ubicar unos $ 4.600 millones en el mercado interno, posibilidad que pareciera esfumarse por el momento.

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