En su visita a Caleta Olivia, el referente radical Luis Cáceres realizó un crudo análisis sobre la realidad política del país y, en particular, la del radicalismo. Planteó que falta un consenso de todos los partidos políticos para sentar las bases de un cambio real y dejar de colocar parches en cada crisis.

Uno de los bastiones del radicalismo que llevó a Raúl Alfonsín a la Presidencia en el año 1983 visitó este domingo Caleta Olivia para reunirse con el Comité Radical Local reelecto el último 10 de junio. Se trata de Luis “Changui” Cáceres, uno de los fundadores de la Junta Coordinadora y del Movimiento Renovación y Cambio quien, apadrinado por Alfonsín, logró la diputación en Santa Fe en el año 1985.

Cáceres estuvo reunido con el presidente del Comité caletense, Matías Quinteros, la vicepresidenta Ana María Altuna, y su equipo, para debatir el futuro de la Unión Cívica Radical, en el café del Hotel Gutero de Caleta Olivia. 

Previo al encuentro radical, el “Changui” intercambió palabras con la prensa y allí se refirió a temas de actualidad como el presente del Partido, su alianza con el Macrismo, y la situación del país frente al arribo del Fondo Monetario Internacional. 

“Tal como está la Argentina, hoy no es un país viable porque tiene 92 impuestos colocados en otra épocas y ya nadie sabe por qué están”, comenzó planteando el escenario nacional. Seguidamente, manifestó que la Argentina es un país con mucha potencialidad que no ha sido aprovechada, por lo que está estancado hace mucho tiempo. “Vivimos colocando parches ante cada situación de crisis. Damos vueltas y vueltas, y bajamos siempre en el mismo lugar. Mientras tanto, los países vecinos, que estaban más atrasados, van avanzando. Este es un momento en el que tenemos que asumir la realidad. Hay que cambiar la cámara de la pelota y dejar de poner parches”, disparó.

Crisis de representación 

Consultado por el presente político, Cáceres expresó que existe una crisis de partidos políticos, pero que eso excede a la Argentina porque también se da en América Latina y en Europa. La definió como una crisis del sistema democrático. “Con partidos políticos fuertes, hay democracias fuertes. Con partidos políticos débiles, hay democracias débiles”, resumió.

En ese contexto, señaló que existe un fuerte cuestionamiento de la sociedad hacia la política, los políticos y los partidos, y que esa es la misma gente que también descree del Congreso y la Justicia, es decir, de la división de poderes en la Argentina.

Para el “Changui” este escenario no es nuevo, sino que comenzó en la década de 1980 con el surgimiento del Neoliberalismo a nivel mundial. Este, dijo, tiende a terminar con las estructuras que tienen una concepción solidaria como los partidos políticos, los sindicatos, los entes cooperativos, etc.

Por eso, frente a esta crisis de representatividad, Cáceres entiende que la respuesta está en implementar políticas que puedan modificar profundamente la sociedad. “Hace falta la convocatoria de quienes entienden que la política es el arte de buscar consensos y no disensos. Hacen falta acuerdos entre el mundo del trabajo y la producción. Lo que no se cumplió es generar esos acuerdos que se convierten en políticas de Estado que permiten a los países salir del atraso”, dijo.

A los radicales

Sobre líderes políticos que actualmente se encolumnan detrás de las banderas del radicalismo, Cáceres dijo a quienes se emocionan cuando escuchan un viejo discurso de Raúl Alfonsín que lo practiquen, porque no alcanza con que se les erice la piel o que se les caiga una lágrima. “Sin consenso y unidad nacional no se sale. Si no vamos a seguir a los tumbos hasta que nos vayamos al carajo”, agregó.

El “Changui” manifestó que no lo van a ver de candidato en “la perra vida”, pero, de todos modos, va a seguir adelante recorriendo el país por “la idea”. En ese sentido, expresó que quienes han sido militantes toda la vida no tienen derecho al cansancio ni a dejar caer la bandera. “Hay que entregarla en mano a otro militante que siga en la senda. Hasta que eso no suceda voy a seguir en este camino”, marcó.

Cambiemos

“Hoy te encontrás un partido en el gobierno más interesado en acuerdos políticos que en gobernabilidad, porque en 2015 no se discutió ni aprobó ningún programa. Cuando hacés un acuerdo político, dura sólo hasta que se cuenta el último voto. Fue sólo cuando hubo un acuerdo para ganar una elección y dar vuelta la página”, dijo sobre Cambiemos.

“Al gobierno lo veo moverse a partir de lo que las encuestas le señalan. Este es el gobierno de las multinacionales, de CEOs que son exitosos en sus empresas, pero que no le cambian la vida a la gente. Este tipo de situaciones hace que se den manotazos y se abran las puertas al Fondo Monetario Internacional”, agregó.

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