Así lo determinó el presidente de la Federación Económica de Santa Cruz, Guillermo Polke, luego de que el martes funcionarios de la Aduana y de la AFIP justificaran la demora en la apertura definitiva del recinto franco de Río Gallegos por “cuestiones normativas y reglamentarias sobre el funcionamiento”.

La Zona Franca sigue demorada por razones “burocráticas” que, luego del cambio de gestión y una vez culminada la obra del recinto franco, primero estuvieron centradas en el Ministerio de la Producción del Gobierno Nacional y luego en la AFIP y la Aduana. Al día de la fecha, aún restas resoluciones aduaneras que permitan el comienzo de su funcionamiento.

Representantes de la Aduana mantuvieron una reunión, en las oficinas de la Zona Franca, con delegados del concesionario, autoridades provinciales y empresarios. Allí sostuvieron que aún no está lista la disposición final, ya que se estaría trabajando “en la aplicación de un sistema informático de control de stock y franquicias”, como así también en los cambios que hay que realizar para la implementación de la franquicia de 600 dólares, acumulativa, según explicaciones de autoridades, por lo que el trámite estaría ahora en la AFIP.

En la reunión estuvieron los ministros de Economía, Ignacio Perincioli y de Producción, Leonardo Alvarez; también Guillermo Polke por la Federación Económica y Joaquín Fernández y Marcelo Ferrro, empresarios locales y permisionarios del recinto franco.

“La conclusión que se saca es que no hay un avance, pero principalmente es que no hay una decisión política que acelere los tiempos para que de una vez por todas contemos con el pleno funcionamiento de las zonas francas en beneficio de los habitantes y de las empresas locales que apostaron a este proyecto”, dijo tajante el titular de la FESC en declaraciones radiales al programa “Café y Noticias” por Radio Al Sur.

El enojo es por una situación que creían debía estar solucionada tras dos años y medio de espera. No sólo se trata de la decepción que acarrean, sino que los permisionarios que participarán de la zona ya han comprado mercadería que deben mantener en depósitos en Buenos Aires y Montevideo. “Es una tomada de pelo, hace un año y medio pago 50 mil pesos por mes para mantener la mercadería en esos depósitos”, dijo enojado a este medio uno de los comerciantes que participarán en la venta de sus productos en el predio.

“Los comerciantes ya han comprado la mercadería y están pagando altos costos por tenerla en otros predios francos a la espera de esta habilitación”, señaló en el mismo sentido Polke, quien insistió en que se trata de “una demora burocrática”.

Indicó también que existiendo otras zonas francas, “esto debería ser en cierta forma copiar y pegar. No es tan complicado. Hasta dicen que no saben hacer los controles. Por eso no me queda otra que decir que hay una falta de decisión política del Gobierno Nacional en apurar esto y elegantemente le han buscado alguna demora burocrática”, reiteró.

Por tanto, advirtió que, desde el sector comercial “nos quedamos como estábamos. Más enojados todavía porque vimos que no hubo ningún tipo de avance”, agregó.

En el mismo sentido, uno de los permisionarios, Joaquín Fernández, se había mostrado “decepcionado” y advirtió que “los tiempos de Aduana y AFIP no son los nuestros”, manifestando estar “enojado por gastar una fortuna en los depósitos que debemos pagar por la mercadería retenida hace dos años”.

Además, otro de los permisionarios, Marcelo Ferrero, dijo que la situación “está tan verde como hace dos años atrás” y también indicó que “hemos hecho una inversión gigantesca con grandes expectativas que no han podido ser cumplidas”.

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