La curadora santacruceña Toia Ibáñez impulsa, a través de la Fundación PAR, “la inclusión en el mundo del trabajo de la gente con discapacidad”. Para ello, un programa de esa organización abrió una galería en Buenos Aires para que expongan esos artistas.

Tras haber sido miembro de la Corporación Argentina de Discapacitados (CADIS) y representante para Argentina y Latinoamérica en la DPI (Organización Mundial de Personas Impedidas el 17 de octubre de 1988 Jacqueline de las Carreras decidió crear Fundación Par, una organización privada, no gubernamental y sin fines de lucro, “para promover la inserción laboral de las personas con discapacidad para su plena integración a nivel competitivo”.
Su visión, según señalan en la página oficial de la Fundación, es “una sociedad que vive de manera natural y activa la plena participación e inclusión”, y su misión es fomentar “la inclusión de personas con discapacidad y fortalecer en la sociedad el derecho de igualdad de oportunidades. Enfocamos nuestra acción en la formación e integración laboral competitiva, la inclusión educativa y la promoción de los derechos humanos y ciudadanos de las personas con discapacidad”, indican.
En ese marco, a través de un programa denominado ArtePAR, la organización abrió una galería de arte “para mostrar la obra de artistas visuales con discapacidad que desarrollen su producción en las disciplinas: pintura, dibujo, ilustración, grabado, instalaciones, textiles y/o fotografía”.
El espacio, según detallan, “promoverá la difusión y exhibición de la obra de artistas visuales con discapacidad, con el apoyo y compañía de importantes representantes del mundo del arte, quedando integrado al nuevo circuito formal de Villa Crespo y Palermo, a través del Gallery Night”.

Hacia la legitimización
Toia Ibáñez es curadora de ArtePAR y resalta “el lema de que las personas trabajen en su propia obra y hasta puedan convertirlo en un medio de vida”.
En declaraciones al programa “En el Tintero” que se emite por Radio LU12 AM680, Ibáñez dijo que se trata de “la primera galería que se abre con estas características”, y destacó el hecho de que se encuentre “dentro del circuito de arte más importante de Buenos Aires”.
“Eso legitima a los artistas con discapacidad”, enfatizó y comentó que “como curadora no pongo el foco en cuál es la discapacidad, sino que lo habilitante es que tenga la persona un carné de discapacidad. Mi trabajo es seleccionar los artistas, ver la obra, la trayectoria y en base a eso tienen su obra. Muestras que duran dos meses para que sean con mucha difusión. Y, además de las inauguraciones, esta galería tiene la particularidad de que en esas salas se dan conferencias de prensa, y la visibilidad de la obra es muy grande”, detalló.
Además, explicó que “todas las expresiones artísticas del ser humano están incluidas dentro del espacio de arte”, y comentó que “muchos artistas vienen del arte terapia y muchos encuentran un camino para expresar cosas que tienen en su interior y empiezan a salir y explotar, y esas son las personas en las que yo pongo el foco para poder legitimarlas dentro de una galería de arte”, aseguró.

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