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La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ha emitido una alerta sobre la obligatoriedad de contar con un Domicilio Fiscal Electrónico (DFE) activo. A partir de octubre, los contribuyentes que no hayan cumplimentado este trámite se exponen a sanciones económicas.

¿Qué es el Domicilio Fiscal Electrónico?

El DFE es un espacio virtual personal y único para cada contribuyente, donde la AFIP envía de manera segura y eficiente toda la información relevante sobre su situación fiscal. Esto incluye notificaciones, resoluciones, vencimientos y cualquier otro tipo de comunicación oficial.

¿Por qué es importante tener un DFE?

  • Comunicación efectiva: Garantiza que el contribuyente esté al tanto de sus obligaciones y novedades fiscales.
  • Evita sanciones: El desconocimiento de una notificación por no contar con un DFE puede acarrear multas y otros inconvenientes.
  • Agiliza trámites: Permite realizar gestiones de manera más rápida y sencilla.

¿Qué pasa si no tengo un DFE?

La AFIP ha establecido sanciones para aquellos contribuyentes que no cumplan con esta obligación. Entre las consecuencias se encuentran:

  • Multas económicas: Las sanciones pueden variar según la gravedad de la infracción.
  • Inclusión en el SIPER: El incumplimiento puede afectar la calificación del contribuyente en el Sistema de Información sobre Empresas y Personas Expuestas (SIPER).
  • Dificultades para obtener certificados y constancias: La falta de un DFE activo puede generar inconvenientes a la hora de realizar trámites como la obtención de la constancia de inscripción.

¿Cómo tramitar el DFE?

El trámite es sencillo y se puede realizar de manera online a través de la página web de la AFIP. Solo se necesita la clave fiscal y seguir los siguientes pasos:

  • Ingresar a la página web de la AFIP con clave fiscal.
  • Seleccionar la opción “Datos de contacto”.
  • Registrar los datos solicitados, incluyendo un correo electrónico válido.
  • Verificar los datos y confirmar el trámite.

¿Qué pasa si ya tengo un DFE?

Es importante verificar que los datos registrados en el DFE sean correctos y estén actualizados. Cualquier cambio de domicilio o de correo electrónico debe ser informado a la AFIP.

Recomendaciones

  • Revisar periódicamente el DFE: Se recomienda ingresar al DFE con frecuencia para verificar si hay nuevas notificaciones.
  • Mantener los datos actualizados: Es fundamental mantener actualizados los datos de contacto, especialmente el correo electrónico.
  • Consultar ante cualquier duda: Si tienes alguna duda sobre el DFE, puedes comunicarte con la AFIP a través de los canales oficiales.
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