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El presidente Javier Milei fue el orador principal y encargado de cerrar este lunes la cena de fin de año de la Fundación Faro, realizada en el Yacht Club de Puerto Madero. El evento reunió a dirigentes, empresarios, académicos y referentes del espacio libertario que respalda el ideario político y económico del Gobierno nacional.

La Fundación Faro, presidida por el politólogo Agustín Laje, se consolidó en el último tiempo como uno de los principales think tanks de orientación liberal vinculados a La Libertad Avanza. Según indican, tiene como objetivo central difundir las ideas del liberalismo para el desarrollo económico y social a nivel global, promoviendo una agenda basada en la libertad individual, el respeto por la propiedad privada y la limitación del rol del Estado.

En ese sentido, la Fundación Faro impulsa la formación de cuadros técnicos y nuevos liderazgos en distintas esferas de la sociedad. Además, desarrolla programas de formación económica y empresarial, así como iniciativas de inserción laboral y capitalización de proyectos destinados a jóvenes profesionales y emprendedores.

Javier Milei en la Fundación Faro, junto a Agustín Laje.

Milei destacó la “batalla cultural” y el rol de la Fundación Faro

Durante su discurso, Milei afirmó que “difundir las ideas liberales en este momento global es una nueva gesta liberadora de la esclavitud a la que nos sometió el Estado pervertido” y remarcó que la Fundación Faro cumple un rol clave en lo que definió como una “guerra espiritual por el futuro del país y la región”.

“El país atraviesa un cambio de paradigma cultural”, sostuvo el mandatario, al tiempo que señaló que se trata de “un conflicto sin balas ni violencias, pero donde se dirimen igualmente las vidas de millones de personas”.

En ese marco, elogió especialmente a Agustín Laje y al intelectual Axel Kaiser, a quienes definió como “grandes artífices del cambio cultural”, y describió a la Fundación Faro como “un verdadero baluarte de la batalla cultural”.

“¿A qué se dedica un gobierno liberal?”, preguntó Milei ante el auditorio. Y respondió: “A nivelar la cancha, respetando los derechos naturales: la vida, la libertad y la propiedad privada, bajo el principio de no agresión”.

El Presidente ratificó el rumbo económico de su gestión y aseguró que la mejor política pública es “achicar el Estado”. “Vamos a seguir bajando el gasto y los impuestos”, prometió, al tiempo que defendió la estabilidad macroeconómica como condición indispensable para el crecimiento.

“El crecimiento económico debe ser un anhelo de cualquier Estado, porque mejora la calidad de vida de los ciudadanos”, afirmó, y sostuvo que el Estado debe proteger “el derecho natural de los hombres libres a ser dueños de su trabajo”.

Críticas a la oposición y elogios a Caputo

En materia económica, Milei respondió a las críticas opositoras y aseguró que “la macro es la suma de la micro”, al tiempo que afirmó que quienes reclaman políticas microeconómicas “están haciendo lobby”. “Este es un gobierno honesto”, enfatizó.

Además, elogió al ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, a quien calificó como “el mejor ministro de Economía de la historia”, y defendió los resultados del programa económico. “Este es el mejor proceso de estabilización de la historia de la Argentina y del mundo”, aseguró.

En la cena estuvieron presentes Martín Menem, Karina Milei y Manuel Adorni

El Presidente enumeró logros de gestión, como la reducción de ministerios, el cierre del déficit cuasifiscal y la salida de millones de personas de la pobreza, y denunció “ataques permanentes” y un “ataque especulativo” durante los primeros meses de su gobierno.

Repudio al antisemitismo y mensaje regional

Durante su discurso, Milei también repudió el atentado terrorista islámico ocurrido en Australia y expresó su solidaridad con la comunidad judía en la Argentina y el mundo. “El antisemitismo es una afrenta directa contra la libertad misma”, advirtió, y alertó sobre su avance a nivel global.

En el plano internacional, felicitó a José Antonio Kast, a quien definió como “presidente electo de Chile”, y celebró su triunfo como una señal de cambio en la región. “Sudamérica está despertando y vuelve a vivir bajo las ideas de la libertad”, afirmó.

Para cerrar su exposición, Milei dejó un mensaje enfático con fuerte tono regional:“Por suerte el continente está despertando, rugiendo y gritando: viva la libertad carajo”.

Con ese mensaje, el Presidente volvió a reafirmar la centralidad de la batalla cultural, el ideario libertario y la proyección regional de su proyecto político.

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