El gobierno de Javier Milei implementa una suba escalonada en los impuestos a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono sobre las naftas y el gasoil. Para eso, dispuso un esquema de traslado de los cargos desde el tercer trimestre de 2021 hasta el mismo período de 2023.
El incremento impacta en el precio en un 4%, por lo que el resto del aumento corresponde la suba de los biocombustibles, la variación del tipo de cambio y el precio del crudo internacional.
Con estas variables, se decidió el incremento de 7,5% desde la medianoche de las principales operadores YPF, Shell (cuya licencia en el país es operada por Raizen), Axion y Puma, que controlan el 95% del mercado.
Habrá nuevas subas el 1 de abril y el 1 de mayo, para luego en junio volver a actualizarse de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor del Indec del primer trimestre de 2024, de acuerdo con la legislación del tributo que establece pauta trimestral.
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