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El juez federal Ariel Lijo procesó hoy con prisión preventiva a Gastón Mercanzini por “lesiones dolosas en grado de tentativa” a raíz de haber arrojado una botella contra el presidente Javier Milei, según la resolución a la que tuvo acceso Télam.
El hecho ocurrió el domingo 10 de diciembre, durante la jornada de asunción presidencial, en el trayecto que Milei realizó entre el Congreso y la Casa de Gobierno.
Al martes siguiente, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires detuvo al agresor, que causó heridas en el rostro de un custodio de la Policía Federal, en las puertas de Crónica HD, a dónde se había acercado aparentemente con la intención de dar a conocer su versión de los hechos que se le imputan.
Ante un llamado del 911, efectivos de la Policía de la Ciudad lo detuvieron en la puerta, sobre la avenida Juan de Garay 140, en el barrio porteño de San Telmo.
Minutos más tarde, el ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos, Waldo Wolff, confirmó que se trataba del agresor del jefe de Estado.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, también se refirió en sus redes sociales a la detención del agresor del Presidente.
“El que las hace las paga: Mercanzini preso”, escribió Bullrich en su cuenta de la red social X, antes conocida como Twitter.
Tras la detención de Mercanzini en la puerta del canal Crónica HD, Bullrich señaló que “Justicia, Nación y Ciudad, juntos contra los delincuentes que creen que siguen viviendo en el país de la impunidad”.
La declaración testimonial de Gastón Mercanzini
“Tiré esa botella sin ver si le pegaba a alguien o donde estaba específicamente el Presidente, la tiré para esa zona”, dijo Mercanzini en su declaración indagatoria ante el juez Ariel Lijo. “Me arrepiento, no quise atentar contras el Presidente”, insistió.
Mercanzini explicó que había atravesado una situación difícil por el consumo de drogas, la falta de trabajo, y que estaba prácticamente viviendo en la calle y estaba alejado de sus hijos tras divorciarse.
Admitió que tuvo antecedentes de “violencia de género” que tuvo y de “daño” por romper una camioneta del Gobierno de la Ciudad.
Qué declaró Gastón Mercanzini ante Ariel Lijo por el botellazo a Javier Milei
“El 10 el día del episodio estaba borracho, no sé qué se me cruzó por la cabeza. Estaba dolido al escuchar que para el presidente electo el plan de convertibilidad era bueno, me afectó mucho eso. Escuchar en la plaza que la gente aplaudía que estamos mal pero que la vamos a pasar peor, que los falcón verdes. Yo no veía donde estaba el auto, solo los gorritos de los granaderos”, dijo.
Y añadió: «Me arrepiento, nunca hice una cosa así, no quise atentar contra el Presidente, todo indica que sí, si lo hubiera querido hacer me ponía gorra y barbijo. No medí las consecuencias, bronca por todo lo que pasa, y todo lo que me pasa a mí. No apruebo lo que hice le pido mil disculpas al oficial que lastimé y a todos sus familiares que vieron ese episodio por televisión, no quise lastimar a nadie, al otro día me di cuenta lo que pasó”.
Continuó pidiendo disculpas: “Lo único que quiero es pedir disculpas por lo que hice y donde esté detenido voy a pedir asistencia psicológica” y contó que fue al lugar “para ver qué pasaba” con la asunción de Milei.
“Quiero pedirle disculpas al Presidente y a su hermana. No quise lastimar a nadie, no tuve ninguna intención de hacerlo. Yo no tengo militancia política, la fotos que aparecieron en los medios con dirigentes políticos me las saqué de cholulo, ni me conocen ellos a mí”, respondió a las acusaciones que le hicieron tras publicarse fotos suyas con varios funcionarios kirchneristas.
Mercanzini continuará detenido, Lijo ahora tiene diez días para resolver su situación procesal.
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