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Como anticipamos este jueves, las cámaras pesqueras y los trabajadores nucleados en el SOMU (Sindicato de Obreros Marítimos Unidos), alcanzaron un acuerdo que posibilitará que los buques congeladores tangoneros puedan salir a pescar langostino.

Las negociaciones llegaron a buen puerto justo cuando los márgenes se acotaban a casi un punto sin retorno. Es que hacía casi 50 días que había comenzado la zafra por lo que la temporada parecía casi perdida. Tanto es así que hasta el gremio como las empresas coincidían que la situación era un desastre.

La temporada del langostino se demoró más de un mes. Ahora se reactivará tras el acuerdo.

Sin embargo, el acuerdo alcanzado entre la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPeCA) y el SOMU establece que el ítem “producción” se abonará en un 70% de manera no remunerativa, lo cual implica un alivio fiscal para las empresas y garantiza que la remuneración del trabajador quede intacta.

El comunicado del ministerio de Capital Humano.

Al respecto, el Ministerio de Capital Humano de la Nación que medió en este conflicto, a través de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, informó este viernes que “se ha llegado a un acuerdo en el conflicto salarial entre el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (S.O.M.U.) y las cámaras empresarias del sector pesquero, integradas por la Cámara Argentino Patagónica de Industrias Pesqueras (C.A.P.I.P.), la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (C.A.Pe.C.A) y el Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (C.E.P.A.)”.

Este acuerdo con el SOMU se suma a los ya alcanzados con los sindicatos SICONARA y Capitanes

Asimismo, otro dato importante que dieron a conocer desde el gobierno nacional es que las partes acordaron reabrir negociaciones en enero de 2026 para revisar los convenios colectivos de trabajo, con el objetivo de alcanzar una solución que preserve el empleo y la sostenibilidad en la operatoria del sector pesquero.

El SOMU sostenía que la posición de las empresas era que el salario de los trabajadores “sea la variable de ajuste”.

“El Ministerio de Capital Humano valora el compromiso de las partes involucradas en el sostenimiento del diálogo social como herramienta fundamental para lograr acuerdos que brinden previsibilidad a la actividad y resguarden el empleo”, suscribieron.

Cabe destacar que desde el sector empresario habían destacado que el acuerdo representa un avance significativo no solo para el restablecimiento de la actividad, sino también para preservar el orden sectorial y consolidar la unidad entre los distintos actores de la industria. Este acuerdo con el SOMU se suma a los ya alcanzados con los sindicatos SICONARA y Capitanes, así como al acordado previamente con los trabajadores de estiba del fresco y congelado.

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