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La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) confirmó un nuevo aumento del 4% en los haberes jubilatorios, pensiones y asignaciones familiares a partir de septiembre. Este incremento se produce en línea con el índice de inflación de julio, según informó el INDEC.
¿Cómo quedan los nuevos montos?
Con este ajuste, el haber mínimo jubilatorio pasará de $225.454,42 a $234.540, mientras que el máximo alcanzará los $1.578.234. Si se mantiene el bono de $70.000 para los jubilados que perciben el haber mínimo, el monto total a cobrar sería de $304.540.
Por su parte, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) se ubicará en torno a $187.632, y con el bono alcanzaría los $257.632.
La fórmula de movilidad y el impacto del bono
Si bien el aumento del 4% se aplica a todos los haberes, el impacto real del incremento varía según el beneficio y la percepción del bono. Al considerar el bono de $70.000, el aumento total es inferior al índice inflacionario, lo que genera una pérdida de poder adquisitivo a lo largo del tiempo.
Esto se debe a que el bono no se actualiza de manera mensual, lo que provoca una brecha cada vez mayor entre los ingresos de los jubilados y la inflación. En contraste, aquellos jubilados que no perciben el bono experimentarán un aumento mayor en sus haberes.
Asignaciones familiares: también con aumento
La actualización también alcanza a las asignaciones familiares, como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación por Embarazo. En septiembre, la AUH se ubicará en $84.250,40.
¿Qué implica este nuevo aumento?
Este nuevo aumento busca acompañar la evolución de los precios y garantizar un mayor poder adquisitivo para los jubilados y beneficiarios de las asignaciones familiares. Sin embargo, la persistencia de la inflación y la falta de actualización del bono generan incertidumbre sobre el impacto a largo plazo de estas medidas.
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