Mientras disfruta de sus vacaciones en Buenos Aires y Williams sigue conversando con Alpine sobre su futuro en la Fórmula 1, el argentino Franco Colapinto entrenó en el kartódromo de Zárate, acompañado de otros pilotos.

Lo que rápidamente se viralizó en redes sociales fue el uso de su antiguo casco, el mismo traje con el que comenzó a competir, y el número 43, que lo acompañó durante sus nueve carreras en la categoría reina.

Colapinto, quien recientemente recibió el Premio Olimpia al Deportista del Año junto a Dibu Martínez, también aprovechó para visitar el restaurante japonés Norimoto. Allí, se animó a cocinar, aunque no logró dorar el alga nori como había planeado.

El piloto compartió un video donde se lo ve con un soplete intentando quemar un alga marina.

Esta tarde, en su regreso al circuito que marcó el inicio de su trayectoria, el piloto fue sorprendido por Matías Bonvin, director del MB1 Racing Kart, quien publicó en Instagram: “Qué lindo verte manejar”, tras encontrar al piloto de la escudería británica en el trazado de Zárate: “Llegás a entrenar… y te encontrás a él”.

Después de probar suerte en golf y pádel, Franco volvió al deporte motor a lo grande, ya que los vecinos del lugar se agolparon en la puerta de acceso del kartódromo para verlo salir, según comentan, a bordo de una imponente Ferrari roja.

Varios videos comenzaron a circular mostrando al joven de 21 años corriendo en Zárate. Tras su sesión de entrenamiento, se acercó a sus seguidores para firmar autógrafos y tomarse fotos. Un niño llamado Ian conversó con el pilarense antes de que este le firmara la remera, lo que generó gran emoción entre los internautas.

En tanto, crece la expectativa por su regreso a Europa en enero, cuando se espera el anuncio oficial acerca de su futuro en la F1, que disputan Williams y Alpine. Cualquiera sea el resultado, su talento y proyección aseguran su permanencia en la Máxima.

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