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Después de varios días de escasez y largas filas en los surtidores, el abastecimiento de combustibles en el país comenzó a normalizarse desde este lunes. Desde el jueves pasado y durante todo el fin de semana, las petroleras y refinadoras realizaron importantes esfuerzos de logística y aprovisionamiento para entregar naftas y gasoil a las estaciones de servicio.
La mejora en la provisión se produjo luego de que el Gobierno nacional anunciara el desembolso de u$s80 millones para la compra al exterior de 10 buques con combustibles. Además, el ministro de Economía, Sergio Massa, lanzó una fuerte advertencia a las empresas del sector: “Si el martes a las 12 de la noche no está resuelto el abastecimiento de combustibles, desde el miércoles no van a poder sacar un barco de exportación porque primero el petróleo de los argentinos es de los argentinos”.
Massa también descartó una devaluación o un aumento abrupto en los precios de los combustibles, y dijo que se está negociando con las petroleras un sendero escalonado y razonable. Por su parte, la secretaria de Energía, Flavia Royón, estimó que la normalización del servicio puede demorar dos o tres días.
Las causas de la falta de combustibles fueron varias: un nivel extraordinario de demanda en los últimos 15 días, una mayor dependencia de las importaciones por paradas programadas en algunas refinerías y una sobredemanda generada por una expectativa de desabastecimiento. El parque eólico cuenta con 43 molinos que generan energía renovable para abastecer a más de 100 mil hogares. Se trata del primer parque eólico de propiedad pública en Argentina y el segundo más grande del país.
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