CRIGAL y su identidad santacruceña: el corazón del equipo que jugará la Liga Nacional

CRIGAL está de regreso en la máxima categoría del básquet adaptado argentino. Luego de un histórico ascenso logrado en Bahía Blanca, el equipo de Río Gallegos se prepara para afrontar una nueva temporada en la Liga Nacional A. El próximo 25 de abril partirán rumbo a Buenos Aires para disputar la primera fecha en las instalaciones de SEDIMA, en San Justo, La Matanza. El debut será el 26 y 27 de abril, y CRIGAL volverá a medirse con los mejores equipos del país, en una competencia que también incluye a la selección de Uruguay, que participa bajo el nombre APRI.

En ese contexto, conocer de cerca a algunos de los protagonistas es también comprender el valor del esfuerzo, el arraigo territorial y el orgullo de representar a Santa Cruz a nivel nacional. Agustín Gómez, Marcos Rosas y Cristian Torres son parte de la base del equipo, tres atletas formados en los barrios de Río Gallegos que hoy integran la lista de buena fe y llevarán el escudo de CRIGAL nuevamente a la elite.

Gómez es ayuda base, nacido y criado en el barrio Belgrano. Rosas, alero, viene del barrio Fátima. Y Torres, quien se desempeña como base, es del Barrio del Carmen. Todos ellos tienen en común no sólo la camiseta, sino un recorrido deportivo que se forjó en la institución y que hoy los posiciona como referentes dentro del plantel.

CRIGAL volverá a competir en la primera división del básquet adaptado tras su ascenso en la final del Torneo Nacional de Ascenso disputado en marzo. En esa instancia, el equipo santacruceño logró victorias claves ante Jujuy y Ensenada, asegurando el boleto a la Liga A antes de caer en el partido final ante DUBA, el campeón del certamen. El regreso a la máxima categoría no sólo es un logro deportivo: es el resultado de años de trabajo, persistencia y un fuerte sentido de pertenencia con la provincia.

Bajo la conducción técnica de Luciano Dalla Fontana, el equipo continúa con su preparación en el CEPARD, entrenando tres veces por semana. Según explicó el propio entrenador en una entrevista previa con La Opinión Austral, CRIGAL está conformado en un 95 por ciento por deportistas nacidos o formados en la institución, lo que le da una identidad única dentro del torneo. En esta nueva etapa, volverá a contar con la experiencia de Vanesa Salcedo y sumará al chileno Francisco Ramírez como refuerzo para partidos puntuales.

Más allá de los nombres, la esencia del proyecto sigue siendo la misma: representar con orgullo a Santa Cruz, crecer desde lo colectivo y demostrar que con compromiso se puede llegar a lo más alto. CRIGAL volverá a decir presente en la Liga Nacional, y lo hará con la bandera del sur bien en alto. Como cada vez que le toca competir, llevará mucho más que un equipo: llevará una historia, una comunidad y el sueño de seguir haciendo historia.