Eduardo Fernández es presidente de la Comisión de Comunicaciones del IAPG y director de la carrera de Ingeniería en Petróleo de la UBA, entre otros roles en docencia y consultoría. Habló con SCP, suplemento de producción, industria y comercio de La Opinión Austral, sobre el barril criollo, con el que concuerda “siempre que se enmarque en una política de largo plazo”. También estimó el futuro del precio del petróleo pos pandemia.

1) Mercado interno

-¿Barril criollo sí, o barril criollo no?
-Es una pregunta compleja. Este sistema funciona siempre que se lo piense como compensación contra estacional, como tienen muchos países de América. Se genera una reserva cuando el crudo está alto que aporte a los productores cuando esté bajo. Si se fija para salir del apuro, no resuelve el problema.
Si en cambio hay acuerdos para sostenerlo en el mediano y largo plazo, sí es útil. Si miramos para atrás, la historia es similar: mucha gente estuvo a favor cuando el crudo estaba alto y el combustible se alineaba con precios internos más bajos.
Pero no somos un país exportador de petróleo neto y, como las empresas productoras son trasnacionales, somos tomadores de precios. El ‘barril criollo’, aunque a mi gusto el término es poco adecuado, puede funcionar siempre que se constituya como fondo de compensación económica. Lo importante es que funcione en el largo plazo y de forma autónoma.

 

Para Fernández, antes de esta crisis ya existía un exceso de oferta de crudo en el mundo

2) Mercado externo

-¿Cuál será el efecto del acuerdo de reducción de la OPEP+?
-El mercado seguirá con sobreoferta. No se logrará el equilibrio en lo inmediato. La caída dramática de la economía mundial provocó la caída de la demanda energética. En paralelo hubo un incremento de la oferta por el NOC (básicamente shale oil y gas) de Estados Unidos. Allí pasó algo curioso: los productores independientes están con muchos problemas financieros, porque tomaron muchos créditos para esa explotación y hoy no pueden cubrir gastos operativos.

-¿Este acuerdo puede hacer subir los precios?
-Creo que los precios van a subir. No al nivel de los USD 60 ó USD 65 que mostraban hace tres meses. En mi percepción, van a quedar en rangos de USD 40 a USD 50 para los próximos 12 a 18 meses. Es lo que pasó otras veces. De todos modos, creo que ese rango (de 40 a 50) será un valor aceptable para que las empresas tengan cierta rentabilidad. La consecuencia es que habrá una revisión de todos los contratos de compra venta de crudo y de la energía en general, en la que se alegarán razones de fuerza mayor, porque las condiciones posteriores a la pandemia van a ser muy profundas.

 

El horizonte para los No Convencionales, en este contexto de crisis, es bastante incierto

3) Futuro de los no convencionales

-¿Cómo impactará esto en los proyectos no convencionales del país?
-Es bastante incierto lo que va a pasar. Creo que teníamos una gran oportunidad con el petróleo y gas de Vaca Muerta, que ahora ha quedado en peligro, porque con 30 dólares el barril y 1 dólar el Millón de BTU para el gas, el NOC argentino se complica. Y cuando se recupere a 40/50 dólares el barril y 2 o 2,5 dólares por MBTU, se va a necesitar también un replanteo de las estructuras económicas y productivas.

-¿Cuál es la estimación para el plazo de recupero?
-Está vinculado con el momento de la superación de la pandemia, que hoy no puede estimarse a nivel mundial. Hoy el transporte ha caído en una fuerte proporción y es el 40 por ciento de la demanda del crudo en el mundo, lo que significa unos 35 millones de barriles. Si hubiera caído a la mitad, estamos hablando de 15 millones de barriles, por lo que en el momento en que se recupere el transporte, volveríamos a un escenario previo a esta crisis, en el que ya había un exceso de oferta, aunque no tan profundo.

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