El ministro de Economía, Sergio Massa, celebró el nombramiento del obispo de Río Gallegos, Jorge García Cueva, como arzobispo de la ciudad de Buenos Aires y destacó que se trata de “un nuevo desafío con grandes responsabilidades” para el religioso.

Con los mismos sueños que hace 20 años“, escribió Massa en su cuenta de la red social Twitter, donde publicó una foto en la que abraza a García Cueva, quien fue nombrado este viernes por el papa Francisco como nuevo arzobispo de Buenos Aires, en reemplazo del cardenal Mario Poli, que ayer encabezó su último Tedeum en la Catedral Metropolitana.

El ministro y exintendente de Tigre expresó: “Felicitaciones querido Jorge García Cuerva por este nuevo desafío con grandes responsabilidades“, dado que conoce al religioso de los tiempos en que trabajaba en barrios de ese municipio y dirigía una parroquia de la zona.

La esposa de Massa y directora de la empresa estatal AySA, Malena Galmarini, se sumó a la salutación y le deseó a García Cuerva “templanza, prudencia, confianza, fortaleza y ternura” para encarar su nuevo ministerio.

Deseo que esta etapa te haga feliz y te ayude a ser parte de la felicidad de tus prójimos. ¡Se te extrañó por estos lares!“, señaló Galmarini en relación a la tarea pastoral que desarrolló en Tigre y también subió fotos de la familia Massa junto al obispo y remarcó: “¡Felicitaciones mi amigo Jorge! Sensibilidad, solidaridad, dedicación, compromiso y lealtad son tu huella“.

“Batallamos juntos más de una. La Cava, Troncos, San Pablo. Y aprendimos. Merecido crecimiento y reconocimiento. Necesario para quienes caminamos el mismo camino”, puntualizó.

La designación de Jorge García Cuerva como arzobispo de la ciudad de Buenos Aires

El nombramiento de García Cueva se conoció esta mañana y en forma simultánea a su designación el Vaticano aceptó la renuncia presentada por el cardenal Poli, al haber cumplido 75 años, el 29 de noviembre de 2022.

García Cuerva nació el 12 de abril de 1968 en Río Gallegos, cuenta con una importante trayectoria académica -es abogado y teólogo-, y además posee una profunda inserción pastoral: fue capellán de varios penales y secretario de la Pastoral Carcelaria del Episcopado.

Además se desempeñó como párroco en la populosa villa La Cava, en San Isidro, así como en otras villas del conurbano bonaerense.

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