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Un nuevo cambio en el sistema de seguridad social argentino está en el horizonte. El proyecto de Presupuesto 2025 presentado por el presidente Javier Milei propone una modificación sustancial en la actualización de las asignaciones familiares, desvinculándolas de la ley de movilidad jubilatoria.
Según lo establecido en el artículo N° 68 del proyecto, las asignaciones familiares serán móviles y se ajustarán de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el INDEC. Esta medida deroga el artículo de la ley 24.714 que establecía que la ANSES era la encargada de calcular la movilidad de conformidad con las pautas establecidas en dicha ley.
¿Qué implica este cambio?
Con esta modificación, las asignaciones familiares dejarán de ajustarse de manera automática en línea con las jubilaciones y pensiones. En su lugar, se actualizarán mensualmente en función de la inflación medida por el IPC.
Esta nueva fórmula de actualización busca brindar una mayor previsibilidad y transparencia en el cálculo de las asignaciones familiares, al vincularlas directamente con la evolución de los precios.
¿Qué pasará con el DNU 274?
El DNU 274, que actualmente regula la actualización de las asignaciones familiares, pasaría a tener fuerza de ley si se aprueba el proyecto de Presupuesto 2025. De esta manera, se consolidaría el nuevo mecanismo de ajuste y se eliminaría la incertidumbre jurídica existente.
¿Cuáles serán las consecuencias de este cambio?
Las consecuencias de esta modificación aún son inciertas y dependerán de diversos factores, como la evolución de la inflación y las decisiones políticas futuras. Sin embargo, algunos expertos advierten que este cambio podría generar una pérdida de poder adquisitivo para los beneficiarios de las asignaciones familiares en determinados períodos, si la inflación supera las expectativas.
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