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De acuerdo con los datos proporcionados por el último informe sobre comercio exterior del INDEC la Argentina logró por primera vez en 15 años un saldo positivo en su balanza comercial energética, con excepción del año de la pandemia (2020).
En el primer semestre de 2024 se registraron exportaciones de combustible y energía por USD 4.818 millones. Este número implica un crecimiento del 26,8% frente al mismo período del año pasado en el cual la cifra fue de 3.798 millones. En particular, para el petróleo crudo, esa variación interanual fue de un 60,2% superior.
Para el mes de junio, la comparación interanual arroja un crecimiento del 24,2%, equivalente a exportaciones por 629 millones de dólares, frente a los 506 del mismo mes de 2023.
En el mismo sentido, el volumen de importaciones registrado para el rubro “Combustibles y lubricantes” decreció un 55,1% en relación al semestre del año anterior, lo que representa una cifra de 2.060 millones de dólares frente a los 4. 587 que debieron importarse en 2023.
La clave
De la mano de Vaca Muerta, el petróleo crudo fue el producto estrella de exportación con 2.534 millones, lo que lo ubicó en el podio general detrás de la harina de soja y el maíz. En tanto, el gas natural acumuló 408 millones, lo que representó un descenso del 22,1% respecto al 2023.
En cuanto a las compras externas, se destaca el caso del gasoil, segundo producto más importado de toda la economía argentina con 612 millones de dólares. Aún así, se registró una notable mejora en relación al año pasado al contraerse en un 56%.
La disminución de la importación de gas, de igual forma, jugó un rol clave. Totalizó los USD 358 millones. Cifra que representó una caída fue del 15,3%. En el GNL (gas natural licuado) se vio la disminución más grande (-74%) al reducirse a sólo USD 275 millones.
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