Hispano volvió organizar el clásico “Bajo Cero” con fútbol infantil y mucho acompañamiento

En medio de un invierno riguroso en Río Gallegos, el calor del futsal volvió a sentirse con fuerza en el gimnasio Tito Wilson del Hispano Americano, donde se disputó una nueva edición del Torneo Bajo Cero, uno de los clásicos del calendario formativo en Río Gallegos. Con la participación de equipos locales y del interior provincial, las jornadas del viernes y sábado reunieron a cientos de chicos en un clima de competencia, diversión y compañerismo.

La edición 2025 del certamen tuvo como protagonistas a las categorías 2013 y 2014, con partidos vibrantes que reflejaron no sólo el nivel de juego en crecimiento, sino también el entusiasmo de los más chicos y el acompañamiento incondicional de las familias. Desde muy temprano, el gimnasio Tito Wilson fue escenario de goles, gritos, emociones y gestos que reflejan lo mejor del deporte de base.

En diálogo con el móvil de La Opinión Austral, el organizador del torneo y referente del club anfitrión, Luis Bonte, destacó el carácter especial de esta edición: “Ha sido un fin de semana diferente. Pudimos realizar el primer Bajo Cero de estas primeras categorías y estamos muy contentos, sobre todo porque también pudieron venir chicos de Piedra Buena, con quienes siempre mantenemos contacto”. Bonte valoró la posibilidad de abrir el torneo a clubes de otras localidades y afirmó que la idea es “seguir creciendo, sumar más equipos del interior y mantener esta tradición de todos los inviernos que para nosotros es fundamental para el desarrollo del futsal”.

La presencia de delegaciones del interior de la provincia no pasó desapercibida. Los partidos no sólo sirvieron para foguear a los más chicos, sino también para reforzar lazos entre instituciones que comparten el desafío de formar en valores a través del deporte. Bonte adelantó que ya piensan en una segunda edición del torneo para julio, esta vez con otras categorías, ampliando así la propuesta que año tras año suma mayor convocatoria.

La jornada de sábado tuvo su punto culmine con las finales. En categoría 2014, se enfrentaron Hispano Americano y Boca Río Gallegos, mientras que en categoría 2013, los finalistas fueron Hispano Americano y Don Bosco. En la categoría 2014, Hispano se impuso por 4 a 1 frente a Boca RG y se consagraron campeones. En la 2013, Hispano repitió y le ganó a Don Bosco por 7 a 0.

Pero no sólo los campeones se llevaron los aplausos. El móvil de LOA habló con Lucas y Valentino, pequeños jugadores del club La Academia, que compartieron su alegría tras obtener el tercer puesto en su categoría. “Hoy me fue bien, jugamos contra Ahoniken por el tercer puesto y ganamos 4 a 3, fue una remontada”, contó Lucas, defensor admirador de Messi. Por su parte, Valentino explicó que “perdimos la semifinal con Hispano, pero después los profes nos dieron una charla y le metimos con todo, lo dimos vuelta 4 a 3. Estamos contentos”.

Además del juego en la cancha, uno de los grandes valores que resaltó la organización fue el acompañamiento de las familias. Bonte subrayó la importancia de ese respaldo para los chicos y el club, afirmando que “hubo mucho acompañamiento, y eso es clave para que estas cosas salgan bien”.

En pleno invierno patagónico, el Bajo Cero volvió a ser una fiesta. No hubo copas internacionales ni premios millonarios, pero sí pasión genuina, emoción a flor de piel y el compromiso de seguir sembrando deporte desde las bases. En el sur, el futsal infantil no se detiene. Y Hispano lo vuelve a demostrar.