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El arquero de Boca, Sergio Romero quedó en el ojo de la tormenta luego que se peleara con un hincha al final del Superclásico, donde River ganó 1-0 y, según trascendió, la Comisión Directiva del club evalúa una dura sanción para él.

Al final del partido, el guardameta increpó a un hincha que lo estaba insultando desde la platea baja y sus compañeros y gente de seguridad tuvieron que retenerlo.

Por lo sucedido la Policía de la Ciudad le labró una contravención por el incidente y Romero tuvo que pedir disculpas públicamente. Sin embargo, según reveló el periodista Augusto Cesar, desde el club están evaluando una sanción por comportamiento para él.

“Hay mucho enojo con la actitud de Sergio Romero. La dirigencia evalúa una sanción al arquero por su comportamiento. Analizan los videos para identificar a los socios y que hizo exactamente Romero. Las imágenes complican mucho al jugador. Semana de decisiones”, detalló el comunicador en su cuenta de Twitter.

La dura sanción que podría recibir Sergio Romero

El arquero se expone a un castigo por ‘incitar al desorden’ después del cruce con un plateísta de Boca.

Salvo que arregle una ‘probation’, como suele suceder, la pena es de multa de $10.000 a $50.000 pesos o de 5 a 30 días de arresto. Al ser deportista, la sanción se eleva al doble.

Investiga el fiscal Maximiliano Vence.

La frase que hizo reaccionar a Chiquito Romero y detonó su pelea con los hinchas

Hubo un clima caliente en La Bombonera luego de la derrota frente a River. Boca no jugó bien y hubo una bronca grande por el gol anulado sobre el final del encuentro que podía significar el empate. Los hinchas insultaron a los jugadores cuando se iban al túnel y Sergio Romero terminó enfrenándose a uno de ellos.

El arquero ya había bajado la escalera hacia el vestuario pero regresó para ponerse cara a cara con los plateístas luego de una frase puntual. “Transpiren la camiseta, hijos de p***“, sentenció uno de los hinchas presentes.

El surgido en Racing decidió volver sobre sus pasos e increpar a quienes lo insultaron. Sus compañeros, con Leandro Brey a la cabeza, intentaron frenarlo sin éxito. No dejó una buena imagen para el club y las autoridades evalúan sancionarlo por sus actos.

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