Hasta el 31 de agosto, regirá la medida en varias localidades de la provincia del norte argentino, incluida la capital San Salvador de Jujuy. Al igual que en muchos otros puntos del país, el brote obligó a las autoridades a cerrar comercios y restringir la circulación. Sin embargo, para el jefe comunal de Palpalá la medida es insuficiente e injusta y propone poner el foco en las reuniones sociales, principal foco de contagio de coronavirus.
“El comercio hoy no tiene la culpa de lo que está sucediendo, son los que más cumplen los protocolos. El problema es que la gente común no hace caso en los barrios y se sigue juntando los fines de semana”, expresó Rivarola, según consignó el sitio Todo Jujuy. “Son dos ciudades que están prácticamente juntas. Tenemos que llegar a un acuerdo en Capital, creo que acá hay que sentarse en una mesa de trabajo”.
Para el intendente de Palpalá, la aplicación de la Ley Seca debe realizarse en conjunto con San Salvador de Jujuy porque caso contrario no tendría sentido y los habitantes cruzarían de localidad en localidad para comprar el alcohol que más tarde llevarían a las reuniones. 2Tenemos una reunión y vamos a resolver porque es medio contradictoria la medida (de cierre de comercios)”, anticipó esta mañana.
En Jujuy, fue Abrapampa la primera localidad en aplicar la medida fue Abra Pampa. Más tarde, según la determinación de sus autoridades, se sumaron San Pedro y Santa Bárbara. “La decisión se tomó porque detectamos muchas reuniones privadas y están consumiendo bebidas alcohólicas. Tenemos que controlar e incentivar que no se produzcan este tipo de juntadas”, aclaró Gerardo Morienaga, secretario de Hacienda de Libertador General San Martín, otro municipio que se sumó a la medida.
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