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La Copa Nacional de Clubes de Mayores se disputó en la pista del CeNARD y reunió a la élite del atletismo argentino: Elián Larregina (récord nacional en 400), Micaela Levaggi (récord en 1500), la reaparición de Belén Casetta (campeona panamericana de 3000 con obstáculos), un campo de velocidad con más de un centenar de inscriptos encabezado por Juan Ciampitti y Daniel Londero, vallas con Renzo Cremaschi y Bruno De Genaro, la garrocha del marplatense Agustín Carril, además de velocistas como Belén Fritzsche, Florencia Lamboglia y Noelia Martínez. Entre lanzamientos destacaron la cordobesa Julieta Salguero y las promesas del martillo Giuliana Baigorria y Carmela Cocco. En ese marco, dos juveniles de Río Gallegos, Santiago Guidetti y Jeremía James Peronja, ambos de 18 años, compitieron en Mayores y sostuvieron una historia compartida que empezó en los gimnasios del sur y hoy se mide con los mejores del país.

En 100 metros llanos, Santiago Guidetti (Club Vial) ganó su serie con 10.67 y clasificó a la final, pero optó por no correrla para preservarse de cara a la convocatoria con la Selección Argentina U20 para el Sudamericano de fin de mes en Lima (Perú). La decisión, tomada junto a su entorno técnico, respondió a una planificación que priorizó salud y continuidad competitiva ante un calendario que va a exigir. En Buenos Aires trabajó bajo la guía del profesor Hugo Gómez, en reemplazo de su entrenadora Mariana Esper.

En salto en alto, Jeremía James Peronja —quien representó al Club Atletas por Laura de la Asociación Atlética Laura Gallardofue subcampeón con 2,03 m, la mejor marca de su carrera, en una final de jerarquía que incluyó al múltiple campeón argentino Carlos Daniel Layoy (Quirón), al último campeón U23 Leyton Morel, al chubutense Taiel Mantello, al cordobés Milo Boero y al bonaerense Juan Brady. James igualó la altura del campeón (2,03 m) y el título se definió por menor cantidad de nulos a favor de Layoy. Llegó al certamen tras una semana de trabajo en Rosario y compitió bajo la conducción del profesor Olmes Fornero.

Jeremías junto al entrenador, Olmes Fornero.

Más allá del resultado puntual, lo que distinguió el paso de los riogalleguenses por el CeNARD fue la madurez de las decisiones y la consistencia técnica en un escenario donde se cruzaron récords nacionales y nombres de referencia. Guidetti eligió cuidarse para sostener su curva en 100 m —y, por proyección, 200 m— de cara a la escena internacional U20; James validó su transición a Mayores con un concurso donde superó los dos metros y peleó el título en cuenta regresiva.

Del sur y sin excusas

La historia que los trajo hasta acá también dice mucho del deporte en el extremo sur. Guidetti y James se conocieron de chicos en el circuito local: hicieron escuela en el Lucho Fernández y el Juan Bautista Rocha, alternaron disciplinas (del hándbol, el básquet, fútbol y el karate al mini atletismo) y, con el tiempo, definieron sus especialidades: velocidad pura para uno, técnica y potencia para el otro. En el medio quedaron inviernos con viento y hielo, viajes largos para conseguir pista y la inversión familiar en pasajes, alojamiento e indumentaria. Ese sostén permitió que, a los 18, ambos ya compitieran de igual a igual con referentes nacionales y compartieran pista con velocistas del máximo nivel nacional.

Una vida compitiendo juntos.

Lo que viene asoma como continuidad más que como ruptura. Guidetti enfocó su preparación inmediata en el Sudamericano U20 de Lima, donde buscará seguir bajando tiempos en la recta; James tomó el 2,03 m como nueva base para ir por otra mejora y sumar competencia con vistas a los Juegos Binacionales de la Araucanía en diciembre, en Santa Rosa (La Pampa). La proyección, en ambos casos, se apoya en lo mismo que los trajo hasta la Copa: método, paciencia y una red de entrenadores —Gómez, Esper, Fornero— que ajustó decisiones a cada etapa.

Así, en un torneo que reunió récords, regresos y apellidos pesados, dos juveniles de Río Gallegos confirmaron que el alto rendimiento también se construyó desde lejos del centro, con rutina, familia y criterio. El CeNARD ofreció el termómetro; Guidetti y James pusieron los números y las elecciones. Para los pibes que miran desde la tribuna o desde una pista de cemento, la lección quedó clara: con trabajo sostenido, también desde Río Gallegos se llega a esta foto.

Jeremías junto a Carlos Layoy, primer puesto y Leyton Morel, tercer puesto y último campeón Nacional U23.

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