Martín Murano carga con la dura de ser hijo de la primer asesina en serie de nuestro país, Cristina Bernal, más conocida como Yiya Murano.

La envenenadora de Monserrat“, fue condenada en 1979 por asesinar a varias de sus amigas, a quienes les debía 300 mil dólares, justamente, envenenándolas al colocarles cianuro en sus tazas de té.

Ahora, Martín, quien en 1994 publicó el libro “Mi madre, Yiya Murano“, reveló que puso en venta el famoso juego de té con el que su madre llevó a cabo los asesinatos, pero bajo un motivo solidario.

“Cuando yo me casé hace muchos años atrás y me mudé, entre las cosas que había en mi casa estaba este juego de té que yo no me quise llevar, así que se lo regalé a una señora”, reveló.

Luego, relató: “Esta señora fallece mucho tiempo después y la hija, hace poco, me dice: ‘tengo algo tuyo, te lo voy a mandar’. Yo ni sabía lo que era. Cuando lo abrí, con una de estas tazas ella le preparó un té a Nilda Gamba, nuestra vecina, que vivía en el mismo piso, que fue la primera de sus víctimas reconocidas porque hubo anteriores, en teoría, y varios intentos, seguro. Uno fue en contra mía, justamente cuando yo tenía 10 años”.

Finalmente, reveló que, luego de una sugerencia de un amigo, optó por subastar la “histórica” de la vajilla, para comprar comida y medicamentos para un refugio de animales de Mar del Plata.

EN ESTA NOTA Yiya Murano

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