La conductora televisiva Viviana Canosa tomó dióxido de cloro durante su programa de TV -que se emite en un horario central- y mostró su rechazo a las recomendaciones sanitarias emitidas contra el coronavirus. Días después, un niño de 5 años murió en Neuquén después de que sus padres le suministraron el producto con la érronea creencia de que lo protegería contra la Covid-19.

En consecuencia, el diputado neuquino Mariano Mansilla había radicado una denuncia penal ante el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad por la presunta comisión del delito previsto en el artículo 208 del Código Penal, que sanciona a quien promociona un medicamento falso.

Juan Manuel Dragani, abogado de Canosa, confirmó que la conductora fue imputada por el delito de “ejercicio ilegal de la medicina”.

 

Viviana está mal. Tuvo un fin de semana donde prácticamente no pudo dormir por esta situación“, contó y consideró que “se trata de una injusticia, una arbitrariedad, un ensañamiento. Por supuesto que después las conductas son cuestionables”, remarcó.

 

“La denuncia que se formuló en su contra es poco seria y es faltarle el respeto a la justicia. El diputado Mansilla omitió mirar el tape y fueron un poco más allá muchos periodistas diciendo que hacía apología del delito o incluso que tenía responsabilidad con el fallecimiento de personas que bebieron dióxido de cloro. Una locura”, opinó.

Leé más notas de La Opinión Austral