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La preocupación ante el cierre del recordado Cine Teatro Carrera y la ausencia de otra sala para disfrutar del séptimo arte fue lo que hace 15 años impulsó a Silvana Espinosa a reunirse con un grupo de cinéfilos.
Jorge Lescano, Silvia Ferrari, Alejandro Sportelli, Patricia Campan, Flavia Carballo, Silvia Mirelman, y Mariana Altieri participaron de la primera reunión.
El deseo de ver cine se encauzó en un ciclo que, de agosto de 2009 a diciembre de 2011, se realizó en la sede de la Fundación OSDE, con el auspicio de la UNPA-UARG y el apoyo del Video Club Salvador como proveedor. Posteriormente y hasta la actualidad, el ciclo se trasladó a la sala de conferencias del campus universitario.
Es así que cada sábado a las 19:00, el grupo Salgamos al Cine! se reúne y proyecta una película con entrada libre y gratuita.
Hoy, hay una multiplicidad de plataformas para acceder al cine sin moverse del sillón. En ese contexto, Espinosa sostiene a La Opinión Austral que la perduración de la actividad se debe “en gran parte, a la conformación del mismo grupo de personas. Es admirable la sintonía en las que nos encontramos en relación a proyectar películas. A lo largo de tantos años nos ha sucedido de todo y el ciclo siempre se pudo mantener, siempre estaba alguno de nosotros para proyectar la película”.
“Más allá de esas posibles dificultades que nos puedan surgir, todos elegimos ir cada sábado a proyectar la película, es una reunión social para nosotros“, destaca.
Al interés y compromiso de cada integrante, se suma que “hay mucha gente a la que le gusta ver cine, que les cuenten una historia. Más allá de que en las plataformas se puedan ver películas, las películas que proyectamos han obtenido algún premio y a lo mejor no siempre están en plataformas, a veces hay que buscarlas mucho o directamente no están”.
Este sábado, tras la proyección de “Golpe de suerte” de Woody Allen, el grupo brindó por su aniversario. Espinosa reconoce que “claramente no” esperaba que el ciclo perdurara 15 años. “Cuando hacemos un poquito de historia, nos asombra saber que estamos hace tanto tiempo y que buscamos que persista. Es una sana costumbre la de elegir películas para proyectar y compartirlas con las personas a las que les gusta”.
Cerrando, a quienes deseen asistir al ciclo, señaló “se va a encontrar con películas, en general, no comerciales, que cuentan historias de alguna forma que no se ve habitualmente en plataformas o en televisión, son premiadas, con actuaciones fabulosas. Por otro lado, es organizar una salida al cine, uno sabe que le van a contar una historia y se va a encontrar con otras personas con la misma expectativa y al terminar, seguramente algún comentario con el espectador que está sentado al lado surge. No es un cine debate, pero es bastante habitual que se de la conversación. Además, el encuentro social, encontrarse con personas que a lo mejor solo compartimos el gusto por el cine, te acerca a otros que no son de tu entorno habitual, descubrís que tenés algo en común y es muy lindo sostener ese vinculo a raíz del cine”.
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