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Una tarde-noche más en la gélida Caleta Olivia fue escenario de un suceso que, por fortuna, solo tuvo que lamentar daños materiales. Un impacto vehicular en el transitado cruce de Lisandro de la Torre y Bernardino del Hoyo mantuvo en vilo a los vecinos, movilizando a los servicios de emergencia y poniendo de manifiesto la importancia de la prudencia al volante en condiciones climáticas adversas. Lo que pudo haber sido una tragedia, por fortuna, quedó en un susto y un recordatorio para todos los conductores que transitan las calles de nuestra querida Patagonia.
El incidente, ocurrido sobre la calle Lisandro de la Torre, involucró a dos automóviles. Uno de los vehículos, un Fiat Siena de color gris, era conducido por un hombre mayor, cuya maniobra inesperada derivó en la colisión. Según el testimonio de uno de los damnificados, quien venía circulando por la calle principal, el otro conductor “venía por esa [calle] que quiso hablar de nu o algo” –una aparente distracción o maniobra errónea– y “no me vio” expresó a nuestros colegas de ZN Noticias . La situación se agravó drásticamente cuando, en un momento de confusión o aparente desorientación, el conductor mayor, en vez de aplicar los frenos, “aceleró”.
El conductor cuyo vehículo fue impactado relató que él “venía despacio por acá”, por lo que el golpe, aunque “fuerte”, fue contenido, evitando males mayores.
La suerte estuvo del lado del automovilista que recibió el impacto, ya que no viajaba solo. Lo acompañaban su hijo y un amigo, quienes, afortunadamente, resultaron ilesos tras el fuerte golpe. Las consecuencias de la colisión se limitaron estrictamente a daños materiales.
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