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Una mujer de 45 años se presentó en las instalaciones de la Comisaría Segunda de la localidad de Caleta Olivia y dejó una bolsa con alimentos para un interno que se encuentra alojado en mencionada dependencia. Sin embargo, el policía que revisó las cosas encontró droga entre los productos. La situación ocurrió alrededor de las 17:20 horas del domingo pasado. Se abrió una investigación.

Este tipo de hechos es más común de lo esperado en la ciudad caletense y en otros lugares de la provincia de Santa Cruz. Los familiares de las personas que se encuentran privadas de su libertad se la rebuscan para ingresarle sustancias estupefacientes, como cocaína y marihuana, al interior de la seccional, dado a que los presos están en abstinencia durante el encierro. En estos casos se da intervención al Juzgado Federal.

La Opinión Austral conoció que el agente que se encontraba cumpliendo la función de cabo de cuarto revisó la bolsa de mercadería y constató que en el interior de un paquete de galletas de la marca “Lía Surtidas” había dos envoltorios de 2,1 y 1,8 gramos de una sustancia amarronada, similar al cannabis sativa. Personal de Narcocriminalidad llevó a cabo el test orientativo y confirmaron que se trataba de esa droga.

EN ESTA NOTA droga interno

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