“Ni la pandemia, ni el viento nos va a parar”, fueron las palabras de Olga Vera, la abuela de Lautaro Pacheco, en la marcha por el triple crimen. El 5 de enero del 2020 Lautaro, su hermanita Karin Fernández y su mamá Natasha Schumacher fueron asesinados en un incendio intencional por un grupo de amigos. Los malvivientes arrojaron bombas molotov contra la casa en la que dormía la familia. Allí también estaba Ricardo Luna, el único sobreviviente del incendio.

El jueves a las 14 horas, familiares de ambos menores se reunieron en la plaza de El Gorosito para realizar una nueva marcha en el marco del año y siete meses desde aquel trágico día. Allí estuvieron Juan Pachecho acompañado por su mamá, Olga, y Alex Fernández con su madre María del Carmen Ñancunfil. En este sentido, La Opinión Zona Norte acompañó y habló con las abuelas, quienes sostienen que el juicio debería ser presencial y no virtual, como se están realizando en la Cámara Criminal.

María del Carmen y Olga.

En primer lugar, Olga contó que van a enviar una nota a la Cámara para solicitar que hagan una excepción y les permitan estar en el juicio, que podría realizarse en diciembre. Y siguió contando que va seguido a visitar a su nieto en el cementerio: “El otro día le llevé su camiseta de Boca, por ahí me quedo horas contándole qué hice en el día, le cuento que lavé toda su ropa con suavizante y ordené su ropero”.

“Sabemos que hay muchas personas implicadas”, dijo María del Carmen Ñancunfil

Por otro lado, La Opinión Zona Norte dialogó con María del Carmen. “Seguimos esperando que el abogado se digne a pedir las pruebas porque es su trabajo -comenzó diciendo y continuó por explicar- cuando la jueza Totino inició la causa según los dichos de Luna, nos dijeron que íbamos a ver todos los videos en ese momento, cosa que nunca sucedió y dudo que hasta esta altura los veamos, para mí ya no están, no existen”.

“Pedimos una excepción para que el juicio sea presencial”, manifestó Olga Vera

Según sus dichos, “hay muchísimas cosas detrás y muchísima gente implicada”. “Los cuatro que están detenidos (Cristian Gil, Adrián Paredes y José y Fernando Gallardo) para mí son los perejiles, porque el principal sospechoso está suelto y hay más personas involucradas que nunca se las mencionó y nunca se las llamó a indagatoria”. María del Carmen duda de que se haya tratado de un ajuste de cuentas y cree que se trata de “algo más grande” que requiere investigación.