Your browser doesn’t support HTML5 audio
Comodoro Rivadavia permanece sumida en una profunda preocupación ante la desaparición de Juana Morales y Pedro Kreder, una pareja de jubilados que lleva ya 23 días sin dejar ningún rastro. Todo comenzó el sábado 11 de octubre, cuando cámaras de seguridad captaron la Toyota Hilux en la que se movilizaba la pareja, dirigiéndose hacia el norte, cerca de la zona de Caleta Córdova. Dos días después, el lunes 13, las familias denunciaron la desaparición.
Las autoridades apuntaron a la hipótesis de un accidente causado por las difíciles condiciones de Cañadón de Visser, un terreno caracterizado por su suelo erosionado y una alta inestabilidad que incluye áreas donde se pueden formar sumideros naturales. El vehículo apareció en un zanjón peligroso que dificultaba la búsqueda. No obstante, con el correr de los días y la llegada de varios expertos, esta línea de investigación habría perdido fuerza.
El drama se intensifica en el plano familiar. Aldana Botha, hija de Juana, expresó públicamente su dolor en redes sociales: “Qué difícil llegar todos los días a casa sin respuestas… nadie me dice nada, nadie vio nada, nadie sabe nada… ¿Cómo puede ser? Cada día que pasa sin saber nada de mi mamá me pesa un poquito más… no hay día que no piense, que no extrañe, que no le pida a Dios que te cuide donde estés y que nos dé fuerzas a todos los que te estamos buscando sin parar. No pierdo la fe, te sigo buscando mamá.”
A 23 días de la última vez que vieron a Juana y Pedro, la policía y los equipos de búsqueda continúan trabajando con un despliegue constante. Se sumaron al operativo un caballo y un enfermero rescatista especializados en áreas hostiles para ampliar las posibilidades de localizar a la pareja. Además, la aparición de una cámara cercana al recorrido de la camioneta podría contener imágenes clave que ayuden a reconstruir los movimientos de Juana y Pedro y esclarecer qué ocurrió post desaparición.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario