En busca de soluciones a la problemática del agua potable en la capital petrolera, autoridades locales están evaluando la viabilidad de instalar una planta desalinizadora de agua de mar en Comodoro Rivadavia. Esta iniciativa, impulsada por el concejal Ezequiel Cufré, busca abordar de manera integral la creciente demanda de agua y los recurrentes cortes de suministro que afectan a la población.
El proyecto presentado por Cufré busca declarar de interés municipal y legislativo el estudio de factibilidad para la instalación de una planta desalinizadora. Esta iniciativa se enmarca en el contexto del Decreto Provincial N° 1447, que declara la emergencia hídrica en el sur de Chubut por el lapso de un año a partir de noviembre de 2023.
El concejal Cufré destaca la necesidad de encontrar soluciones permanentes a la escasez de agua y a los cortes de suministro que afectan a Comodoro Rivadavia y otras localidades. Actualmente, la ciudad depende principalmente del acueducto proveniente del Lago Musters, ubicado a 160 km de distancia, lo que genera dificultades, especialmente durante la temporada estival de mayor demanda.
“Todos conocemos la complejidad de Comodoro Rivadavia, que trae agua de una distancia de casi 160 km desde el lago Musters de Sarmiento y que tiene diferentes complejidades y dificultades, sobre todo en la época de mayor demanda que es el verano, donde la comunidad y los vecinos tienen problemas semanales”, explicó Cufré en diálogo con Diario Crónica.
“Comodoro tiene que tener otra posibilidad de solución y se verá en qué momento ponerlo en marcha y si es viable, pero es necesario que tenga la respuesta y que conozcamos los costos para poder comparar, el costo que tiene traer agua de Sarmiento, repotenciar los acuíferos y desalinizar el agua de mar. Eso creo que tiene que estar a disposición para el momento de analizar y saber si es efectivo o no es efectivo”, agregó.
Las plantas desalinizadoras ofrecen una alternativa prometedora para proveer agua potable en zonas con escasez de recursos hídricos. Diversas ciudades de la costa atlántica patagónica, sin cursos de agua superficiales como ríos, han implementado con éxito este sistema. Caleta Olivia, Puerto Deseado y Puerto San Julián, en la provincia de Santa Cruz, son algunos ejemplos de localidades de la costa atlántica que ya cuentan con proyectos desarrollados de ósmosis inversa.
La Planta Desalinizadora de Caleta Olivia produce alrededor de 12 millones de litros de agua potable por día, demostrando la viabilidad y el potencial de esta tecnología en la región.
“Sabemos que transcurrió un tiempo muy importante sin una verdadera solución por lo complejo que es por la falta de financiamiento, porque no se termina de resolver la repotenciación del acueducto, pero creo que es necesario que la comunidad tenga otras alternativas”, aseguró el concejal Cufré respecto a la situación en la capital petrolera.
Y concluyó: “Es otra alternativa, que por un lado será el desarrollo de los acuíferos y por otro lado será tener la posibilidad cierta de instalar una planta de desalinización de agua de mar”.
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